AFECTACIÓN DE LA ACTIVIDAD ANTRÓPICA EN LOS BOSQUES QUEÑUALES DE CHIHUATA

AFECTACIÓN DE LA ACTIVIDAD ANTRÓPICA EN LOS BOSQUES QUEÑUALES DE CHIHUATA

Chihuata es un distrito de la ciudad de Arequipa, hogar de diversos ecosistemas en los que residen especies en un medio físico adecuado a sus necesidades como los queñuales y diversas especies fauna. La zona donde se desarrollaban los queñuales estaba considerada como un ecosistema frágil, ésto debido a la depredación. El queñual es importante para el poblador local porque posee múltiples usos, es una fuente de leña para la cocción de alimentos y madera para la construcción de corrales, mangos de herramientas y tínteles. También, la corteza posee propiedades medicinales para curar enfermedades respiratorias y renales; la corteza también se utiliza como tinte para teñir tejidos.

Los queñuales son una especie forestal que contribuye a regular el clima y a prevenir la erosión de los suelos, así como para almacenar grandes cantidades de agua que alimentan a los manantiales. Es el árbol más resistente al frío en el mundo y crece en áreas que están por encima de los 5000 m.s.n.m. Esta especie es muy importante en su ecosistema, tiene funciones ecológicas claves, de ésta depende la vida de varias especies en la zona altoandina de esta región.

En el 2018 ocurrió un incendio forestal, luego de haberse hecho las investigaciones correspondientes se pudo determinar que el origen del fuego fue a consecuencia de la actividad económica humana, en el afán de ganarle terreno a la naturaleza, acción que desencadenó un incendio que no se pudo controlar; el Gobierno Regional de Arequipa en coordinación con el Equipo de Primera Respuesta en la Gestión del Riesgo de Desastres, después de denodados esfuerzos logró acabar con el incendio; es preciso señalar que el incendio forestal causó grandes daños y la desaparición de queñuales. Arenazas Rodríguez es profesor de Biología en la Universidad Católica de Santa María y realizó algunas investigaciones en la zona.  La facultad de Ingeniería Ambiental realizó una visita de campo a los queñuales de Chiguata, para recolectar información, hoy valiosa para su repoblamiento. El especialista precisó que la especie perjudicada es la Polylepis Rugulosa, caracterizada por tener escamaciones que al caer generan una cadena de vida para insectos, aves y reptiles, como la lagartija andina, generando un ecosistema natural que ahora resultó interrumpido, desafortunadamente. El incendio produjo muchas pérdidas en flora y fauna y dejó un ecosistema muerto debido a que ya era considerado débil antes de que este sucediera.

“Hay además especies de aves, como el pájaro canastero, que hicieron de los queñuales su hogar y que ahora deberán desplazarse a otros lugares, muchos deben haber muerto en el incendio”, indicó, a tiempo de precisar que otra de las especies afectadas es el murciélago andino, además de los insectos que murieron calcinados en las 200 hectáreas comprometidas, de las 4 mil 500 que tiene el bosque, donde habitaban 194 especies de fauna, muchas de ellas en peligro de extinción. Todo un desastre.

Este año, Serfor ha planteado su reforestación. El 30 de Abril se realizó una plantación de queñuales, inicio de un proyecto que tiene como objetivo reforestar 100 hectáreas de queñuales para este año. Hasta hace unos años el bosque de queñua constaba de 100,000 hectáreas, hoy en día existen solo 4,000 hectáreas de ahí la importancia de reforestar dicho bosque, considerado el más grande de la región, afirmó Juan Pinto Corrales, especialista de la Administración Técnica Forestal y de Fauna Silvestre de Arequipa.

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