ANALISIS BIENESTAR SOCIAL EN LAS UNIVERSIDADES

ANALISIS BIENESTAR SOCIAL EN LAS UNIVERSIDADES

El bienestar social se basa en las situaciones vivenciales de cada persona en la sociedad, así como al funcionamiento de este dentro de ella; esta contiene cinco dimensiones: aceptación, integración, contribución, organización y realización dentro de un grupo social. Así también como la preocupación por comprender qué sucede en nuestra sociedad. Como efecto tenemos que este evita emociones negativas como el estrés, ansiedad o depresión que se presentan constantemente en la comunidad universitaria, debido a la presión académica y las dificultades que esta etapa de la vida presentan, como desarrollar hábitos no saludables o debilitar las relaciones familiares y/o amicales. Si las universidades velan por el bienestar social de los estudiantes, estos mejorarían su rendimiento académico, desarrollarían sus habilidades musicales, deportivas o artísticas, evitando futuras enfermedades.

En nuestro país, la antigua Ley Universitaria era muy limitada, pues solo otorgaba funciones que no eran cumplidas y que en la realidad se limitaban al manejo para la elección de las autoridades como el Rector y Vice Rectores, dando el protagonismo al autoritarismo universitario y la representación estudiantil. Lo único que ha traído esta norma ha sido conflictos y denuncias, por razones políticas o intereses de determinados grupos aprovechándose de la ineficacia de esta Ley. Tampoco se ha realizado ninguna de las muy necesarias modificaciones estatutarias para el bienestar estudiantil y el desarrollo de la investigación y acreditación.

Con la nueva Ley Universitaria Ley N° 30220, los legisladores se han enfocado en la comunidad universitaria, la cual está integrada por docentes, estudiantes y graduados; estipulando sus deberes de integrarse mediante programas educativos y sociales en beneficio de la sociedad y el compromiso con el desarrollo sostenible de esta. Fijando también el deber de cada universidad en ofrecer enseñanza de calidad sin dejar de lado el bienestar social de sus alumnos, debiendo comprometerse con la realidad nacional, regional y local; brindando diversos proyectos para mejorarlo e integrar la participación de la comunidad universitaria.

En cuanto al enfoque técnico de dicha Ley y su relación con el bienestar social, pese a los cuestionamientos de sus opositores, el tribunal Constitucional ha declarado que dicha Ley es constitucional. Quedando demostrado que la educación no es solo un derecho, sino un auténtico servicio público que explica una de las funciones y fines del Estado, cuya ejecución puede operar tanto en universidades públicas como privadas aunque siempre bajo fiscalización estatal, mediante la SUNEDU, institución creada por esta Ley Universitaria, y que a la actualidad ha hecho un loable labor velando por una educación de calidad. Aunado a ello, se demuestra que dicho enfoque va de la mano con el enfoque político y social, mediante actividades culturales, artísticas y deportivas que fomentan la creación intelectual basada en valores. Y para el acceso de diversos materiales, dando las facilidades a los alumnos para acceder a estos. Mediante el Programa de Servicio Social Universitario, de manera obligatoria se establecerán actividades temporales de los estudiantes universitarios, tendientes a aplicar conocimientos y proyectos de políticas públicas de interés general cuya finalidad se busca con la mejora de la calidad de vida de la población.

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