ANTECEDENTES DEL ESTADO MODERNO

ANTECEDENTES DEL ESTADO MODERNO

El Estado, es la organización política dentro de un país, es decir, la estructura del poder que rige dentro de un territorio a una población, poder-gobierno, territorio y población, son los tres elementos que podemos encontrar dentro del estado, son los elementos porque hay una fuerte relación entre los mismos, ya que estos son factores importantes de la integración del mismo Estado, y si alguno falta, no hay razón de existencia. El Estado Mexicano como todo Estado, implica una organización o estructura.

ÉPOCA PREHISPÁNICA

En lo que actualmente nosotros conocemos como el territorio nacional, durante distintos periodos cronológicos y culturales antes de la conquista, muchos pueblos con diferentes grados de civilización. Aún sin importar la época por la cual estaban cruzando, estos pueblos contaban con diferentes tipos de organización que obviamente se acoplaba a sus necesidades como pueblos reducidas a reglas establecidas por quienes eran los guías de estos pueblos, comenzaban ellos a organizarse de manera primitiva pero muy funcional. Dentro de estos pueblos en donde surgía este tipo de organización, destacan principalmente: los otomíes, quienes ocupaban algunas regiones de los estados de Tamaulipas, Nuevo León, San Luis Potosí, Guanajuato, Querétaro e Hidalgo,  los Olmecas y Nonoalca en el centro del país, los Zapotecas y Mixtecos en Oaxaca, Xicalango en la costa del Golfo, etc. Las relaciones entre los miembros de estas sociedades eran del tipo personal y la unión entre el grupo se basaba en prácticas religiosas y ritos sociales tradicionales.

El surgimiento del sedentarismo, que fue una base esencial para la creación de la distribución de las tierras entre los miembros de una sociedad, lo que ahora lleva por nombre: propiedad privada Los primeros Estados, en Egipto, Mesopotamia, China, la India, Mesoamérica, los Andes, etc., surgieron, por una parte, como una delegación del poder social en una estructura política capaz de asegurar el derecho de propiedad frente a competidores internos (ladrones) o externos (invasores) y, por otra, como una organización destinada a hacer posible la realización de los trabajos colectivos (construcción de canales, presas, acequias, etc.) necesarios para el conjunto de la comunidad. Estos primeros Estados se caracterizaron por ejercer un poder absoluto y teocrático, en el que los monarcas se identificaban con la divinidad. Entonces, el poder se justificaba por su naturaleza divina, y eran las creencias religiosas de los súbditos las que lo sustentaban.

Grecia, fue quien experimento por primera vez actos políticos, la ciudad política griega era la Polis o Ciudad-Estado, que en ciertas ocasiones tuvo un gobierno democrático, los habitantes que conseguían la condición de ciudadanos, condición a la que los esclavos no podían aspirar, podían participar en las instituciones políticas, en Atenas principalmente existían estas posturas.

Los filósofos Griegos creían que el núcleo del concepto Estado se encontraba principalmente representado por la idea de poder y sumisión, Platón, en sus obras: La Republica y Las leyes, escribió que la soberanía política debería someterse a la ley y que solo un Estado en el que la ley fuera el soberano absoluto, por encima de los gobernantes, podría hacer felices y virtuosos a todos los ciudadanos. Aristóteles estableció distintas formas de gobierno y de constitución, y acepto límites al ejercicio del poder mediante el poder y la justicia.  

ESTADO

En toda sociedad humana existente, la paz existente es gracias a la existencia de cierto poder que se enfoca en los intereses particulares, que ha llegado a ser posible gracias a la creación de las distintas formas de gobierno que se han desarrollado a lo largo de la historia y en los distintos territorios existentes sobre la tierra.

Puede decirse que el Estado aparece como una sociedad políticamente organizada dirigida en  el poder soberano que está establecido en un cierto territorio, la teoría más común, y aceptada por consiguiente establece que el Estado está dividido en tres elementos esenciales que son: Territorio, Población y Poder-Gobierno, este último dividido a su vez en dos porque existe una gran diferencia entre el Poder-Gobierno, que más adelante será explicado brevemente, dentro de estos elementos podemos hacer clara una clasificación, hablamos acerca de los elementos formales, a lo que se refiere el elemento el poder-gobierno, y además y hablamos acerca de los elementos materiales, que son: el territorio y la población.

TERRITORIO

Para abordar el territorio, debemos dirigirnos al artículo 42 de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos en su fracción primera, que señala: “El territorio nacional comprende: El de las partes integrantes de la federación, haciendo referencia a los estados y el Distrito Federal. A el elemento Territorio, podemos verlo desde dos perspectivas distintas, las cuales conllevan a dos formas, la primera es que puede ser interpretado de acuerdo a el articulo 42 en la totalidad de sus 6 fracciones, en el que incluye a las islas, incluyendo arrecifes y todos los cayos en los mares adyacentes, incluye también a las islas de Guadalupe y Revillagigedo que están situadas en el océano pacifico, la plataforma continental y los zócalos submarinos de las islas, cayos y arrecifes, además las aguas de los mares territoriales en la extensión y términos que fija el derecho internacional y las marítimas interiores y el espacio situado por el territorio nacional con la extensión y modalidades que establezca el propio derecho internacional.

O también puede ser interpretado de una manera distinta, haciendo una división, de acuerdo a los 3 elementos: tierra, agua y aire, en la parte de tierra, hacemos alusión a lo que se refiere a las islas, islotes, bancos de arena y la plataforma continental, dentro de lo que cabe en el elemento agua, nos referimos a el mar territorial y a lo concerniente a las aguas nacionales, dentro de las cuales encontramos a los ríos, lagos, lagunas, archipiélagos, etc. Y por último en el elemento aire, se encuentra el conjunto de radiofrecuencias y el espacio aéreo mexicano, que establece como limite a la primera capa existente de la atmosfera.

La noción de territorio, al decir de DE ROUSSEAU, es un tanto compleja, limitándonos a su contenido tanto lo que indica la aceptación etimológica y ordinaria del término, como el espacio aéreo situado sobre la superficie del Estado, noción que siguiendo al autor mencionado anteriormente, jurídicamente ofrece el inconveniente de confundir las de espacio y territorio, lo que puede conducir a calcar los regímenes jurídicos del mar territorial y espacio aéreo sobre el del territorio propiamente dicho.

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