Adam Simith. La naturaleza y causa de la riqueza de las naciones

Adam Smith. LA RIQUEZA DE LAS NACIONES

Capítulo I. De la división del trabajo.

Este capítulo hace referencia principalmente al progreso en las facultades de producción, es decir; la División del trabajo, mismo que funciona de la siguiente manera: cierta producción está dividida en pequeñas ocupaciones, desempeñadas una a la vez por trabajador, y éstos a su vez en ramas de producción.

Existen distintas formas de producción, es decir; estas dependen del número de bienes que deben de producir para satisfacer la cantidad demandada de bienes y/o servicios por el número de población en la que ofertan. Con esto hacemos referencia a que por lógica a mayor número de demanda se requerirá de mayor producción, y a su vez mayor número de obreros, y de manera inversa.

Esto nos da como resultado un visible aumento en la cantidad de productos ofertados en el mercado, por las siguientes 3 principales causas:

1. Mayor destreza del obrero: ya que al reducir la tarea del hombre a una operación sencilla y repetitiva hace que adquiera rapidez y agilidad, misma que aumenta la cantidad de producción.
2. Ahorro de tiempo: si una persona realiza todas las etapas de producción, se pierde mucho tiempo en pasar de una actividad a otra, y a su vez concentración, así como la propensión a la falta de destreza en las mismas.
3. Invención de máquinas: su origen lo tiene en la división del trabajo ya que el obrero busca los métodos más idóneos para desarrollar la actividad que desempeña o, por otro lado; desarrollados por fabricantes especializados / filósofos.

Con el excedente de la producción, que es más allá de lo que necesitan para satisfacer sus necesidades, se proveen recíprocamente de bienes en una población.

En la parte última del capítulo primero el autor cita lo siguiente: “Realmente, comparada su situación con el lujo extravagante del grande, no puede por menos de aparecérsenos simple o frugal; pero con todo eso, no es menos cierto que las comodidades de un príncipe europeo no exceden tanto las de un campesino económico y trabajador, como las de éste superan las de muchos reyes de África, dueños absolutos de la vida y libertad de diez mil salvajes desnudos”.

En este párrafo hace referencia a todo el trabajo que lleva implicado cualquier artículo por más simple que sea, como por ejemplo; un abrigo, requirió del trabajo desde quien consiguió la piel, el hilandero, tejedor, confeccionista, transporte; el de quien creó el tipo de transporte, y el de quien lo realiza, entre muchos otros, lo que implica que por simple que sea el producto requirió de mucho trabajo en conjunto, por lo que en opinión del autor, es totalmente equiparable el trabajo implicado en las pertenencias de este caso un príncipe, al de cualquier otro integrante de la población.

Capítulo II. Del principio que motiva la división del trabajo.

La División del Trabajo no se dio por planeación del hombre, sino por la incapacidad del mismo para generar todos los productos que satisfagan completamente sus necesidades, por lo que se vio obligado a la PERMUTA de bienes; esto, al darse cuenta de que haciendo algo en lo que él era bueno, e intercambiarlo, obtenía más del producto ajeno que necesita, que el que podría conseguir por su cuenta, esto lo induce a dedicarse solo a esta ocupación y perfeccionar su talento en ella; dando lugar a diferencias de aptitudes, creadas por la práctica o hábito al que se acostumbre.

Esto, según el autor, es un acto de egoísmo, ya que lejos de procurar el bienestar de otros, buscamos por interés propio satisfacer nuestras necesidades, y esto ocurre con todos, por ello que al realizar una Permuta: NO hablo de MI necesidad, sino de SUS ventajas. Acto que solo se encuentra en el hombre, ya que se llega a acuerdo de interés común.

Capítulo III. La división del trabajo se halla limitada por la extensión del mercado.

Por el hecho de que la Permuta es causa de la división del trabajo, ésta se encuentra limitada cuando no existe una vasta extensión de mercado donde puedan intercambiar sus productos, razón que le impide dedicarse a un solo oficio.

Esto obliga a que la división del trabajo se vea delimitada por extensiones demográficas, ya que mientras en zonas urbanas se cuenta con el suficiente abastecimiento de gran variedad de productos a mayor alcance, en zonas rurales, por la distribución de su población, es decir la lejanía entre comunidades e inclusive casas, limita la accesibilidad para el intercambio, por lo que se ven obligados a la elaboración de diversa cantidad de productos para su consumo, y no a la dedicación de la elaboración de un solo producto.

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