Alicia Fernández Calderón: Mantenimiento Del Aula (físico Y Social).

1. Con el asesoramiento de los profesores selecciono un alumno de cada clase para que colabore conmigo durante todo el curso.

Como característica principal este alumno debe ser responsable. No tiene por qué ser el delegado ni tener buenas notas, pero sí debe ser responsable. A partir de ahora y en el resto del documento le llamaré mi “colaborador”.

2. Reúno a los colaboradores y les explico en qué va a consistir su trabajo:

Su trabajo es totalmente voluntario, lo desarrollarán a lo largo de todo el curso y en el caso de que en algún momento decidieran abandonarlo deberán decŕmelo para que yo pueda bucar a otro colaborador. Ante cualquier tipo de problemas no deberán dudar en hablar conmigo.

Una vez a la semana, siempre en su hora de tutoría, siempre que el colaborador pueda (que no tenga exámenes, por ejemplo) y siempre que el tutor le de permiso, deberá buscarme para contarme los problemas que hay en su clase.

Todos los problemas los recoge en un folio. Este folio es un plano de la clase (documento adjunto ó diario de clases), de manera que cada problema se corresponderá con el equipo en cuestión.

3. Me paso por todas las aulas explicándole al resto de alumnos lo que tienen que hacer para que este sistema funcione correctamente.

4. Estoy pendiente de que este sistema funcione y si los alumnos dejan de ir a verme soy yo quien los busca.

Es importante que el colaborador vaya a verme sólo y exclusivamente en su hora de tutoría. Esto impide que se “escurran” de clases con otros colaboradores que sí van a su hora correcta.

Como ya he comentado, si en la clase no hay problemas el colaborador siempre puede echarme una mano organizando el material.

5. Voy informando de todas las incidencias que considere oportunas, sobre todo cuando hay roturas en clases por desorden (intencionadas o no) por parte del alumnado. O poca colaboración en el espacio físico de este.

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