Análisis de la película "Doce"

Hace poco escuché un par de definiciones sobre la confrontación...

Generalmente asociada a la pelea, esta palabra no tiene muy buen marketing, especialmente en este último tiempo. Sin embargo, si se va al significado real de la palabra, vemos que apela a "ponerse frente a algo o alguien", "cotejar una cosa con otra", es decir, apunta a ideas más parecidas a enfrentar algo o alguien más que a pelearse, enojarse o criticar.

En 12 Hombres en Pugna, este significado de la confrontación está más claro que en ninguna otra película. Ella nos muestra un jucio por asesinato, donde los que deben decidir si el acusado es culpable o inocente son los 12 hombres (civiles, comunes y corrientes... es de destacar que ninguno es llamado por su nombre) que integran el jurado.

La peli no muestra el juicio sino el debate de los 12 hombres para poder decidir.

El jurado entra en su sala e inmediatamente hacer un primer voto preliminar, sin discutir absolutamente nada sobre lo presentado por las partes en el juicio. El presidente del jurado llama a votar a mano alzada y 11 de ellos, sin vacilar, levantan su mano para declarar al presunto asesino (un chico de 18 años), culpable de todo crimen; para condenarlo, así a la silla eléctrica. Ante este escenario, lo más fácil sería sumarse a la mayoría y levantar la mano también... pero hay uno de ellos que no se acopla ni amilana, sino que se pone frente al problema y ante el resto que ha decidido, los confronta, con un voto a favor de "inocente".

Claro que el cuestionamiento y la confrontación cae mal al resto de los 11. Siempre hay uno contrera... Pero el jurado N° 8 no se hace problema por el qué dirán, sino que explica sus motivos y argumentos: Él no está seguro sobre la inocencia del chico, pero así como no está seguro sobre esto, tampoco está seguro sobre su culpabilidad, entonces... es justo levantar la mano para mandarlo a la silla eléctrica así nomás? o como jurado le deben un debate? No quiere convencer a nadie, no quiere imponer su verdad (no tiene una verdad definida), simplemente quiere debatirlo. Poner en duda para cotejar la información y las evidencias que mostraron en el juicio y, por sobre todas las cosas, lograr que cada uno de los jurados ponga sobre la mesa sus prejuicios, temas personales y demás cuestiones que puedan estar nublando semejante decisión.

Así, con el solo hecho de animarse a confrontar y no EVADIR el problema, un tipo solo... y bastante corajudo... da vuelta una historia. Solo por eso, la película vale mucho la pena.

Además de darnos una lección sobre el buen uso de la confrontación, 12 Hombres en Pugna es una lección sobre cine; especialmente por hacer uso de las cámaras y luces de forma magistral, aprovechando cada ángulo y lugar en un solo espacio, donde transcurre toda la película. Si se suma a esto

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