Checoslovaquia

Checoslovaquia

Fue una república de Europa Central que existió entre los años 1918 y 1992. Es un pequeño estado que no tiene salida al mar y fue fundada como uno de los sucesores del Imperio austrohúngaro apenas finalizó la Primera Guerra Mundial. El 1 de enero de 1993 se escindió pacíficamente dando lugar a dos países: República Checa (o Chequia) y Eslovaquia. Ambos países forman parte de la Unión Europea desde 2004.

El 18 de octubre de 1918, acabada la Primera Guerra Mundial, se proclamó el nuevo Estado de Checoslovaquia como país independiente del imperio Austro-Húngaro. En 1939 Checoslovaquia fue invadida por la Alemania Nazi. El mismo año se había firmado el tratado Motolov-Ribbentrop que se basaba en la repartición de Europa Oriental y Central, entre la Unión Soviética y Alemania, a pesar de todo, Hitler rompió el pacto de no agresión e invadió parte del territorio soviético. Unos años después, en 1946, Edvard Benes fue elegido como presidente mediantes elecciones parlamentarias; pero en el año 1948 mediante una conspiración Eslovaca contra el gobierno nacional, los soviéticos tomaron el control del poder.

Unos años después, en el año 1953, en la unió soviética falleció Stalin y Nikita Khrushchev asumió el pode con varias ideas reformistas. Luego, el reformista Alexander Dubcek fue nombrado nuevo líder del Partido Comunista Checoslovaco e instituyó cambios radicales durante el periodo conocido como “La primavera de Praga”. Por el mismo tiempo, los países del Pacto de Varsovia invadieron Checoslovaquia y anunciaron la Doctrina Brezhnev que consistía en no dejar que un país y comenzó un periodo de “normalización” que consistió en el regreso del control estricto del Partido Comunista sobre la vida checoslovaca.

Durante la Segundo Guerra Mundial, las tierras checas fueron designadas como Protectorado de Bohemia y Moravia, y fueron gobernadas por el Estado Alemán. Se ordenó la retirada de la ciudadanía a las personas de origen étnico alemán y húngaro, y a las que decidieron adquirir la ciudadanía alemana y húngara durante la ocupación. Esto se utilizó para expulsar a alrededor del 90% de la población alemana del país de Checoslovaquia.

DIVISIÓN DE CHECOSLOVAQUIA

Como consecuencia del Pacto de Munich, renunciaron los líderes del gobierno democrático de Checoslovaquia, y el presidente Benes abandonó el país y se fue a Francia. Al encontrarse bajo gran presión alemana desde afuera y presión separatista eslovaca desde adentro, lo que quedaba del estado se reestructuró en un régimen autoritario y pasó a llamarse Checo-Eslovaquia, para reflejar con este nombre la importante autonomía concedida a Eslovaquia. Estos esfuerzos no lograron impedir que la Alemania nazi instara a los otros vecinos de Checoslovaquia a que exigieran partes de su territorio. En el otoño de 1938, como

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