Colombia Un Pais Sin Proteccion

COLOMBIA UN PAIS SIN PROTECCION

Los sucesos catastróficos que se presentaron en Haití, chile, Nueva Zelanda, Japón, Australia, Brasil y Colombia nos da paso a estudiar y revisar más a fondo si nuestro país está verdaderamente preparado para sortear nuevamente una ola invernal u otro evento fortuito a causa de la naturaleza; pues es evidente que las catástrofes naturales afectan desde economías precarias hasta las más desarrolladas.

El sismo que afecto a Haití es un claro ejemplo de que es de suma importancia que cualquier nación cuente con una política coherente de gestión integral de riesgo, ya que esta, permite identificar los riesgos a los cuales está expuesto un país, cuantificar sus posibles efectos, mitigar sus consecuencias en las áreas más críticas, diseñar un mecanismo de transferencia o cobertura del mismo y, al final, establecer esquemas de atención post-desastre.

Los países en desarrollo como el nuestro centran su atención en los esquemas post-desastres, este es el grave error que se comete, pues estamos acostumbrados a extender la mano en momentos de crisis a las ayudas internacionales, a regalar mercados y a improvisar albergues para los afectados, y esto hace que los recursos destinados al desarrollo económico se desvíen afectando el crecimiento del país.

La situación que vive actualmente Haití, habiendo transcurrido más de un año, nos demuestra como la atención post-desastres no es una buena estrategia para reiniciar una economía, para que los afectados retornen a su vida normal y para que no se genere aún más pobreza, miseria e inseguridad en un ciclo sin fin de subdesarrollo.

Chile nos demuestras que a pesar de ser un país emergente, muestra una economía más sostenible que la de Haití, y es notable como ellos si tienen una política de gestión de riesgo coherente que involucra diversos aspectos de la sociedad.

Chile si ha evaluado y ha sabido tomar buenas prevenciones a los riegos a los cueles este país está expuesto, se puede decir que identificaron, cuantificaron, y mitigaron el riesgo, diseñando esquemas de transferencia de riesgo, donde una parte importante de la infraestructura y cerca de un 15% de los bienes inmuebles cuentan con un seguro.

Colombia también cuenta con una economía más fuerte que la de Haití y contamos con una con una política de gestión de riesgo catastrófico más desarrollada; a pesar de esto esta política ha presentado fallas en su implementación, fallas que deben ser atendidas para que el próximo evento, como el caso reciente de las inundaciones en el territorio nacional, y poder así superar de la mejor manera la situación.

Por esto es importante complementar un esquema de atención post-desastre, basándose en la conformación de toda una infraestructura que tiene como propósito atender las necesidades primarias de los afectados y pasar a un esquema ex –ante de gestión

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