Compromiso De Tradición, Cambio Y Modernidad De La Casa De Estudios Superiores, Universidad Nacional, En Un Mundo Globalizado Y Con Tendencias Neoliberalistas Durante El Primer Semestre 2012.

Compromiso de Tradición, Cambio y modernidad de la Casa de Estudios Superiores, Universidad Nacional, en un mundo globalizado y con tendencias neoliberalistas durante el Primer Semestre 2012.

Alfredo Carrillo Chacón.

Comunicación Escrita.

El presente ensayo plantea un análisis del enfoque académico de la Universidad Nacional y la racionalización de los recursos que se emplean para la producción masiva de egresados con un alto nivel de competitividad dentro del mercado laboral y un perfecto manejo de las convicciones, la moralidad y la ética para convivir en la sociedad, en contraste con lo que en verdad está sucediendo y las variantes que intervienen en el proceso de formación que no permiten que se cumpla completamente esta utopía propuesta.

El sistema de educación pública como parte de su estrategia para insertar a la población estudiantil en el sector productivo ha desarrollado una máxima Casa de Estudios conocida como la Universidad pública, en la cual la sociedad hace una serie de inversiones proporcionando un recurso económico que se recoge de los impuestos, producto de la fuerza laboral del país. Esto permite que se pueda otorgar un presupuesto que debe ser utilizado de la manera más eficiente y racional posible. Y además se confia en esta institución. Quizá el recurso más valioso de una sociedad, de un país es la juventud, hombres y mujeres en busca del conocimiento que les brindará una mejor vida, llena de satisfacciones pues podrán desempeñar labores donde se involucren en el campo que decidieron estudiar en la universidad y que más adelante formarán parte activa de nuestra sociedad, por lo que se espera que esta juventud termine su formación muy preparada, integral académicamente, moralmente definida y con una ética de trabajo que le permita realmente convertirse en un agente propulsor de cambio en el ambito social, en que se integrará a partir del momento en que deje las aulas universitarias.

Estos objetivos utópicos que han sido impuestos dan lugar a una serie de controversias entre lo que se debería hacer, y lo que es necesario hacer en este momento, algo así como ubicar la utopía en la realidad.

Para lograr dichos objetivos la Universidad debería cubrir varias áreas, que están profundamente ligadas unas con otras ya que para formar seres completos es necesario enfocarse a desarrollar diferente aspectos del ser humano, En primer lugar, lo académico todo lo relacionado con la capacidad para producir conocimieno y competencia para saber interpretar los distintos fenómenos político sociales y culturales con inteligenca y con sentido crítico. Hoy más que nunca se necesitan individuos más dispuestos a los retos y a los cambios que cada vez ocurren más rápidamente, en los cuales también los enfoques de aproximación han ido evolucionando, sin embargo en la Universidad la aplicación de nuevas técnicas de estudio en combinacion con las que ya se ha comprobado que funcionan es un proceso que se está haciendo de manera muy progresiva.

Lejos quedaron los días en que las verdades podían repetirse durante años y seguían siendo más o menos funcionales o suficientes. Hoy en día el carácter efímero del saber que hasta hace pocos años parecía irrefutable se pone en duda a cada instante y esto debe ser lo que caracterice la actividad intelectual universitaria, la capacidad de revisar continuamente los conocimientos y categorías que nosotros mismos hemos ayudado a fundar. Nada hay tan temporal y cambiante como el conocimiento y eso no debe olvidarse nunca, por que forma parte de la esencia misma del ser universitario.

Una de las razones por las que los cambios no suceden a la velocidad que deberían se debe al hecho de que de las instituciones, que la sociedad ha creado, una de las más reacias al cambio es la institucion universitaria. Debido a su capacidad para adaptarse a las situaciones cambiantes y seguir siendo la misma. Por supuesto, ello tiene que ver con que su estructuta y funcionamiento se rigen por el hecho de que, si bien es cierto la Universidad es un proyecto académico, resulta más que ovbio que paralelamente también es un proyecto político, pues la ingerencia de este en el destino de sus futuros gobernantes y gobernados siempre ha ido de la mano con el modo como la universidad funciona y se organiza internamente.

De ahí la ambivalencia de los proyectos universitarios, guardianes y reproductores de la tradicion nacional, cultural, artística e identitaria y, a la vez se quieren y se conciben como promotores del cambio social, tecnológico y científico.

En segundo lugar, quien tiene un impacto directo en el resultado del producto final que se incorporará a la fuerza laboral, históricamente ha sido la docencia que ha venido a proporcionar un rol ligado con la conservacion de la tradición y del conocimiento, y quizás por eso mismo los contenidos que enseña están siempre un paso atrás de lo que se está descubriendo en el presente. Los planes de estudio, contenidos, y profesores tienden a petrificarse por años, esto es de esperarse pues son dos generaciones conviviendo en un mismo espacio. Lo cual es una consecuencia de la función de la Universidad como guardiana de la tradición, entendida esta como un conjunto de costumbres, y creencias, una masa o una generalidad de conocimientos con su modos de pensar que le son propios, que existen funcional o disfuncionalmente en el presente y que han sido heredados por supuesto de nuestra historia.

Además la Universidad está a su vez formanda por docentes que van a trabajar en las instituciones preuniversitarias, podríamos perfectamente estar frente a una situacion en que la Universidad lejos de promover el cambio, estaría produciendo mentalidades profundamentee reactivas. Al final de cuentas, lo que realmente se transmite es una estructura de pensamiento y de funcionamiento, un modo de concebir el conocimiento y la función

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