| El conformismo y la mediocridad del mexicano Mi punto de vista muy personal es que la mayoría de los mexicanos tenemos una mentalidad mediocre y conformista, estoy plenamente convencido de ello, pocos son los que realmente se aferran a la idea de ser mejores de sobresalir más allá de su esfera de influencia, todos nos escudamos en frases como, “soy mejor que el de abajo”, “no soy tan malo como algunos otros”, “no soy el último de la fila”. Muchos se escudan en la religión “dios así lo quiso”, “es nuestro destino”, “es lo que nos toca”. Escuchas la manera en que la gente piensa, ves la manera en que las personas actúan, te das cuenta que pocos quieren realmente ser mejores, sólo algunos pretenden más cosas para su familia, muchos simplemente se muestran como cobardes y prefieren tener algo seguro a arriesgar a algo más ya que les puede ir mal, ó porque prefieren no moverse, debido a que donde se encuentran tienen comodidad. Tuve la oportunidad de desarrollar actividades gerenciales en una empresa y al estar buscando personal, me encontraba como común denominador en muchas solicitudes de empleo en el apartado que te preguntan “¿Cuál es su meta en la vida?” la frase de “ser mejor”. Pero ser mejor, ¿mejor que?, mejor hermano, mejor empleado, ¿Mejor?.... Y normalmente era decepcionante el saber que ser mejor para ellos, solo radicaba en una cosa, conseguir un empleo, cansarse del que estaba en curso y seguir buscando otro, sólo por el afán de “ser mejor”. Hasta el día de hoy, he trabajado todos los días en ser el mejor, el mejor hermano, el mejor amigo, el mejor compañero, el mejor motivador, el mejor... pero te das cuenta necesariamente que hay muchas personas mejores que tu, y eso ni yo ni nadie lo puede poner en duda, mi actitud es simple, cuando encuentro a una persona mejor que yo, simplemente lo exprimo al máximo en sus conocimientos, actitudes y cosas que me sirven para crecer como persona y finalmente superarlo al final del camino, y es una actitud permanente, de todos los días, de cada momento. Creo firmemente que son dos instituciones directamente quienes tienen la culpa de nuestra mentalidad mediocre y de nuestro conformismo, el PRI (y no quisiera hablar de política) y Televisa (tampoco quiero hacerle publicidad a nadie). ¿Porqué?, es simple, mientras un partido político nos limitaba los más posible, gracias a que mientras más ignorancia hubiera, mejor para quienes tenían los grupos de poder, sin duda eso era excelente para ellos, no había reclamos, toda la gente feliz, debido a que al llegar la época de elecciones, llegaba un completo desconocido a las comunidades y te ofrecía un peso por un voto para ellos y una torta por ir a un mitin político, sin duda y nadie (espero) diferirá de este comentario, gracias a estas personas que se encargaban de robarnos y de ocultarnos todo lo necesario nos volvimos unas personas mediocres y conformistas. Por otro lado la televisora que todo mundo conoce, si la que produce programas que estimulan la idiotez, el analfabetismo y la falta de cultura exagerada, que produce novelas que hicieron que la cultura de la mujer fuera llorar para solucionar todos los problemas, esperar a que llegara un príncipe azul y que les resolviera la vida, en lugar de pasar programas educativos o culturales que no generan “rating” porque la gente prefiere gastar su tiempo en programas que todo mundo conoce, y que solo nos llevan a estimular la bolsa de los actores y productores que se mofan del dinero sin importarles lo que llevan realmente a los hogares de todo el país. Es increíble cómo no puedes entablar una conversación interesante con una persona de cualquier nivel social, ya que está más al pendiente del capítulo 798 de la telenovela que concluye el lunes, y no les interesan otro tipo de temas, que cuando les preguntas si han leído “la odisea”, solo por cultura general ó por exigencias en la escuela, te contestan que una odisea es lo que hizo Hugo Sánchez en Europa. Me decepciona muchas veces que parte de mi círculo de amistades, se desentiende de mi persona, al comenzar a hablar de situaciones que deberían de importarnos, pero que preferimos omitir porque “no nos corresponde a nosotros actuar”, no estamos en esa situación y mientras así sea, todo será secundario. Me refiero solo al hecho de que nuestra cultura es lo que sabemos y no hacemos por saber más, entre menos sabemos disminuyen nuestros problemas, no tenemos exigencias, menos nos presionan, batallamos mucho menos y de esa manera limitamos todo tipo de esfuerzo. Pase casi cinco años con la persona de mi vida y por el medio en que ella trabajaba tenía como amigas a mujeres hermosas, una noche en una cena me presentó a una de ellas y a los tres minutos de conocernos le dije tajantemente “cuando estés conmigo, no digas tonterías, si no vas a hablar de algo inteligente, mejor cierra la boca”. Desde luego fue un impacto tremendo para ella, no sólo el hecho de no quedar cautivado por su belleza, sino el atreverme a decirle que solo debía decir cosas que valieran la pena comentar. ¿Fue mi comentario muy crudo, muy duro?, no simplemente fue realista y externe lo que debía externar, punto. | [pic 1] |