Corrupcion controlada por la auditoria

LA CORRUPCION CONTROLADA POR LA AUDITORIA

La auditoría, un examen que recaba información sobre la actividad económica y del análisis operacional de las empresas que da a conocer la situación en la que se encuentran, puede convertirse en un arma para desatar las preocupaciones de los líderes de estas, si es que estos quieren desviarse del profesionalismo y de la ética que los resalta.

Según profesionales auditores, los titulares de las empresas son conscientes de que el mundo empresarial sería un lugar muy diferente y complejo sin las auditorias, sin embargo, estos dueños no estás de acuerdo en ello, ya que estos velan principalmente por la dirección de la empresa con fines lucrativos ambiciosos, no en su totalidad claro está, sin embargo, de ser la auditoria un problema que los desvié de su finalidad, estos titulares pueden tomar medidas para suprimir informaciones que atenten contra la reputación tanto de sí mismos, como de la empresa; pese a muchas críticas hoy en día, algunos auditores realmente no cumplen del todo con las funciones que se les otorga como profesionales, porque ellos “tienen que velar” por la información que a los inversionistas y accionistas les interesa, pero esto conlleva a un informe de auditoría desviado o distorsionado y con mayores complicaciones; de realizarse una correcta auditoria, siguiendo los pasos y funciones que realmente se les atribuye, se podría asegurar la insatisfacción de los titulares en algunos casos, siendo este el motivo que lleva a que el auditor no cumpla con su verdadero roll, sin embargo existe y prevalecerá la lucha contra estas personas, accionistas o titulares de las empresas, que buscan finalidades impúdicas dentro de la sociedad.

El papel del auditor y su responsabilidad en la lucha contra el crimen financiero, incluida estos fraudes a través de la auditoria, viene definido por normas de auditoria, seguidamente, el profesional que cumple con su ética y escepticismo profesional como parte de sus principios, ayudará a revelar actos de corrupción, como parte de la lucha contra este tipo de crimen.

Pese a muchos intentos de corrupción que las empresas pueden lograr desarrollar, un auditor, puede implantar su ética y profesionalismo para que estas puedan encaminarse a un desarrollo netamente justo, la auditoria está preparado para ayudar a descubrir actos de corrupción que son respaldados por normatividades, sin embargo, no es su trabajo perseguir fraudes, ya que esto se realiza únicamente en ocasiones donde es necesario la intervención de estos personajes; de este modo mencionaría para concluir, que, de ser necesario la auditoria está en una posición firme para contrarrestar daños que surgen por actos de corrupción de algunos personajes que dirigen las empresas, pese a no ser una función que estos adquieren, sin embargo el profesionalismo que estos asumen, conlleva a que generen una responsabilidad en aras de cuidar la integridad empresarial.

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