DEMOCRACIA DAVID ORTIZ

DEMOCRACIA EN COLOMBIA / 2013

Al referirnos al termino democracia hablamos de una forma de organización social que atribuye el poder legitimo a la sociedad; La democracia es una forma de organización del estado en la cual las decisiones colectivas son adoptadas por el pueblo mediante mecanismos de participación directa o indirecta que confieren legitimidad a sus representantes, ese es el término que entendemos y el concepto de democracia y participación.

Desde mi punto de vista, en Colombia la democracia es parcial y la participación legitima y total del pueblo colombiano se ve obstruida por factores de participación y por desconocimiento de este derecho y de este deber que es necesario aplicar bajo conocimientos previos que conlleven a una participación masiva y a una expresión popular o en mejores términos al pronunciamiento del pueblo, por otro lado este llamado ”pronunciamiento del pueblo” se ve opacado por representantes o servidores públicos que no constituyen la representación total o parcial del pueblo, puesto que generalmente su planes u opciones de gobierno son totalmente cambiadas de rumbo, cabe anotar que después de ejercer democracia en unas elecciones populares que es como generalmente los colombianos ejercemos este derecho se pierde contacto total con los “servidores públicos” o “representantes del pueblo” que en primera instancia ofrecieron ser nuestros representantes y velar por nuestros derechos, es decir luego de ejercer la democracia el poder o representación prácticamente es nulo, y quedamos a merced de nuestros dirigentes y sus designios, motivo por el cual encontramos grandes dificultades en el desarrollo de muchos contextos y vacíos que tiene el país, podemos tomar como ejemplo el sector agrario donde el 31,6 % de la población colombiana paro sus actividades totales, y entro en paro nacional, esto debido a que con sus dirigentes o representantes, escogidos por la participación de el mismo 31,6% de colombianos que ejercieron su derecho al voto, no tuvieron opciones de dialogar o sentirse representado por estos mismos dirigentes lo que conllevo al paro nacional y a consecuencias de orden público traumáticas para el país, la democracia, la manifestación y representación del pueblo se pasa a otro plano, el plano de la rebelión pública y el grito popular, donde en estas estancias los “representantes escogidos por nosotros mismos” deciden si es viable escuchar a la población o definitivamente ejercer su sentido de democracia bajo la fuerza del poder público y autoritario tomando las “decisiones más convenientes para el país”, esto sin escuchar y verificar a fondo las verdaderas necesidades del pueblo colombiano, teniendo en cuenta que esto es solo con el sector agrario y que representa solo el 31,6% de la población colombiana y de los votos que en su momento decidieron dar.

Como tal existen y quedan grandes vacíos de representación del poder público

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