De luchas, errores y aciertos se construye Economía.

De luchas, errores y aciertos se construye Economía. Un pequeño vistazo de la teoría agrícola a la práctica en el campo.

            A veces solo nos acomodamos en nuestra zona de “confort” y nos es difícil salir de ella, queremos luchar e ir en contra de un sistema pero no nos movemos, organizamos o armamos para poder realizar cambios y hacer surgir nuevos paradigmas.

Cómo cambia la mentalidad cuando de verdad se vive de cerca la realidad de la gente y se es parte del trabajo que ellos realizan día con día. Esa fue la experiencia vivida con el grupo de Economía Agrícola, el pasado fin de semana, en lo más norte de El Salvador que jamás creí estar, en el Departamento de Morazán, visitando los municipios de Jocoaitique y Perquín. Fuimos parte de una experiencia única, vivir un fin de semana en el campo, escuchar y sentir en carne propia todo lo que las personas campesinas viven en la actualidad, escuchar también parte de sus historias de cuando eran combatientes y cómo han llegado a ser pequeños empresarios a través de su actividad agrícola.

Nuestro país El Salvador a través de su historia de construcción, crecimiento, guerras, conflictos, terremotos, huracanes y demás sucesos que en la sociedad acontecen surgen héroes como los que conocí. El pasado conflicto armado, luego de su fin, los que habían luchado, gracias a esa entrega por la causa que ellos defendían, por sus ideales y objetivos de justicia social e igualdad, los combatientes fueron beneficiados con el Programa de Transferencia de Tierras, surgido en los Acuerdos de Paz.

Estos héroes que conocí fueron Don Modesto Amaya, Doña Silvia Sáenz, Don Salvador y Don José Tomás Gómez todos excombatientes de la guerrilla en el Departamento de Morazán, hombres y mujeres sencillas, humildes, trabajadores, amables y dispuestos a que conociéramos el trabajo que realizan. Estas personas se dedican a cultivar la tierra ya sea con su parcela entregada con el PTT o porque crearon nuevos proyectos y son beneficiarios de algún programa del gobierno.

Don Modesto, Doña Silvia y Don Salvador, nos mostraron como la abeja a través de arduo trabajo produce tantos productos que pueden ser aprovechados por el ser humano en la industria farmacéutica, en la industria cosmética, en la industria de alimentos y más, porque los productos que se pueden aprovechar de la obra de las abejas son: la miel, la cera, el propoplio, el polen, jalea real. Ellos (Don Modesto, Doña Silvia y Don Salvador) a través de la formación de cooperativas de campesinos logran transformar los productos y luego comercializarlos, además poder vivir de esto. Algo que pude constatar y que el salón de clases la maestra ha dicho, no es lo mismo pertenecer a una cooperativa que de verdad tener el valor del cooperativismo. Don Salvador nos comentaba que existen cooperativas de caficultores, apicultores, horticultores, artesanos y demás; que es gracias a la organización que han logrado construir que pueden hacerle frente a las dificultades y también experimentar e implementar nuevos proyectos.

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