EDUCACIÓN Y PANDEMIA Una visión académica

EDUCACIÓN Y PANDEMIA

Una visión académica

La educación en línea. Transiciones y disrupciones. (María Concepción Barrón Tirado).

Pásg. 66-75

El COVID-19, en nuestro país se hacen visibles las brechas sociales y económicas ya existentes.

Es un momento coyuntural en el que se pone de manifiesto la crisis de la estructura económica, política y social vigente; en consecuencia, la población ha visto alterada su estabilidad familiar, profesional y laboral. Ante este panorama, se espera que nada vuelva a ser lo mismo una vez que pase la marea… o al menos es lo que muchos deseamos. Y así como se espera que el mundo cambie, la educación está llamada a hacer lo propio, de forma teórica, pero sobre todo práctica.

Esta coyuntura, se rodea de incertidumbre, ya que los medios de comunicación informan noticias falsas, ambiguas y contradictorias. Además de que, la pandemia nos ha distraído de otras problemáticas y movimientos sociales que habían tomado relevancia en el país y en las instituciones escolares, como la violencia de género, la migración, la sustentabilidad y la violencia asociada al narcotráfico.

Nuestra vida en general se encuentra en un proceso de cambio. La salud es lo más importante, en un sentido de solidaridad desde lo individual. Así, la educación a distancia, medida por la tecnología, se ha convertido en la herramienta principal para continuar con las labores educativas en todos los niveles.

La UNESCO monitoreó el impacto del coronavirus en la educación a nivel mundial y la AUNIES realizó acuerdo, para dar continuidad al trabajo académico.

Todas estas medidas se pusieron en marcha en las instituciones educativas mexicanas a partir de marzo del año en curso y se prevé que se regrese a clases presenciales, tentativamente, hacia el segundo semestre del año. Aunado a lo anterior, cada escuela se ha dado a la tarea de diseñar propuestas para dar continuidad al trabajo académico durante la contingencia sanitaria, con el principal apoyo de las TIC.  Se han enfrentado grandes retos: tecnológico, formación docente, en los alumnos uso y manejo de plataformas digitales. Además, en nuestro país 60 por ciento de la población carece de una computadora y no tiene acceso a internet. Además, sale a relucir la falta de un proyecto de educación nacional de largo alcance que atienda a todos los sectores sociales.

Así, innegablemente, vivimos en la era digital, directa o indirectamente impacta en diversos ámbitos de la vida: familiar, educativo y laboral. En este sentido, se obliga repensar el sentido de la institución escolar y del currículo formal, tradicional, alejado de la realidad y que deberá resurgir para asumir los retos que surjan después de la contingencia, así como la crisis.

La educación en línea sin duda es necesaria, pero insuficiente, si de entrada no se cambian los paradigmas educativos, es imprescindible, cambiar las formas en las que enseñamos y aprendemos; no sólo sumar la tecnología a los procesos educativos, sino que realmente sea una disrupción que motive cambios profundos en las prácticas pedagógicas cotidianas. Las TIC, por sí solas, no tienen una función pedagógica y su uso no siempre conlleva procesos pedagógicos innovadores, por eso, es necesario abrirnos a las tecnologías, sin dejarnos aprisionar por ellas.

Desde la pedagogía se tiene la gran responsabilidad ética de crear condiciones para que los estudiantes sean autorreflexivos, bien informados y tengan la capacidad de unir el aprendizaje con el cambio individual y social. El principal reto de la educación superior será lograr la formación de ciudadanos éticos, solidarios s, colaborativos, comprometidos con el planeta, en una sociedad globalizada, capaces de enfrentar la incertidumbre.

La UNAM no se detiene

La UNAM bajo el lema “La UNAM no se detiene”, impulsó el uso de las TIC para continuar con sus actividades académicas y administrativas, puso en marcha el Campus Virtual, desde 1971 se creó el SUA, bajo un modelo semipresencial, y que en 1995 se creó el SUAYED, en donde actualmente se ofrecen 22 licenciaturas a distancia y 24 en sistema abierto.

El Campus Virtual ofrece la posibilidad de que un profesor interactúe con sus alumnos en tiempo real o tiempo diferido a través de las aulas virtuales (Zoom, Google Classroom, Edmodo y Moodle) y se apoye de diferentes recursos digitales interactivos: videos, audios, textos y sitios web, entre otros.

Con ello, la UNAM buscas hacer de esta oportunidad un proyecto pedagógico disruptivo de largo aliento, incluyente, intercultural, equitativo, sostenible y vinculado a la realidad social en constante cambio.

La falta de acceso y aprovechamiento de los medios y las tecnologías: dos deudas de la educación en México (Janneth Trejo-Quintana).

Págs. 122-130

Durante la década de los 90 se decía que, la televisión no educa, pero los niños y jóvenes aprenden de ella, lo que la escuela lograba en seis horas, en menos de una lo destruía la televisión. La perspectiva, no ha cambiado mucho.

Durante mucho tiempo, la educación mediada por tecnologías (en las que se incluyen medios de comunicación análogos y digitales) ha sido desestimada por diversos agentes sociales, entre los que se encuentran los tomadores de decisiones y diseñadores de políticas públicas, pasando por directivos escolares, profesorado y padres de familia.

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