EL ABORTO; PREPONDERACIÓN DE INTERESES Y LA RESPONSABILIDAD DEL PROFES

FACULTAD DE DERECHO

OPTATIVA: BIOETICA

“EL ABORTO; PREPONDERACIÓN DE INTERESES Y LA RESPONSABILIDAD DEL PROFES

FECHA: 23 DE MAYO DEL 2019

INTRODUCCIÓN

A lo largo de los años la sociedad ha cambiado varios rasgos arraigados a la costumbre de los tiempos en los cuales se desarrolla una comunidad, siendo uno de los principales “modus vivendi” los que son regidos ante los requisitos de la misma “socialité”. Es decir podemos ver como nuestros abuelos, bisabuelos y el parentesco consanguíneo en línea directa ascendente, en los cuales en los tiempos antiguos de la sociedad existía familias robustas y numerosas, familias con un promedio de 5 hasta 10 hijos y que las parejas desde muy jóvenes traían hijos al mundo, muchas veces sin importar espacio o la economía misma de la familia.

 Es de donde partimos ¿Qué tanto ha influido la sociedad para que las parejas no quieran procrear más de un hijo? ¿La sociedad misma orilla a las parejas a interrumpir la gestación por un mejor bienestar? Desde un ámbito de la sociedad en donde en el presente se señala a los jóvenes que tiene hijos a temprana edad (con el consentimiento de ambos o por fallo de algún método anticonceptivo), por perseguir una economía más estable, por seguir un ritmo de vida alejado de la crianza de los hijos. ¿Es esto un factor dirigido al aborto? Si esto lo pensamos de una manera objetiva, ¿Por qué es aceptada por los médicos sino corre peligro en la madre o el feto pudiese estar en óptimas condiciones de seguir su gestación? ¿El médico que lo practica prepondera un interés económico-social que el privilegiar una vida?

En estricto sentido los médicos ante su juramento hipocrático deberían de preponderar la vida antes que cualquier otro interés. Parte también de la ética de los médicos como profesionistas es el hecho de proveer los medios necesarios para consolidar una sociedad más firme con valores éticos y preponderantes para construir una mejor percepción de la comunidad, ¿Por qué no procurar la ley para seguir salvando vidas? ¿Por qué no crear leyes multidisciplinarias para encontrar una verdadera normativa en conjunto para el aborto?

En la siguiente investigación proveeremos un humilde punto de vista.

Iniciamos hablando acerca del decrecimiento de los números de integrantes o más bien de hijos que existen hoy en día así como lo menciona Excelsior desde su sitio en internet: “El Consejo Nacional de Población (CONAPO) contribuyó a disminuir el número promedio de hijos por mujer de 6.1 en la década de los años 70 a 2.15 en 2018, informó la Secretaría de Gobernación (Segob).

A través de un comunicado, dijo que, a 44 años de su creación, el CONAPO trabaja para fortalecer las políticas públicas en la materia y consolidar el México Sostenible.

Las autoridades del Consejo tienen como objetivo ofrecer a las nuevas generaciones los espacios adecuados para desarrollar sus capacidades y habilidades, con miras a la Agenda 2030.

Creado el 27 de marzo de 1974, a partir de las reformas a la Ley General de Población, el organismo incluyó los fenómenos poblacionales en los programas de desarrollo económico y social del sector gubernamental, la implementación de acciones para la desaceleración de la dinámica demográfica, el fortalecimiento de las prácticas de previsión y planeación familiar libre, responsable e informada.

En la actual administración, el Consejo coordina la Estrategia Nacional para la Prevención del Embarazo en Adolescentes, cuyas metas son disminuir en 50 por ciento la tasa de fecundidad de las mujeres de 15 a 19 años y erradicar los embarazos en niñas menores de 14 años para 2030…” Al igual que las recomendaciones del gobierno así también como las diferentes formulaciones y planes que existen como éstas campañas de recomendación, sabemos muy bien que la sociedad ha cambiado la forma de pensar en diferentes aspectos, sobre todo en el hecho del modo de vida que las familias tienen enfocándolo directamente a un nivel socio-económico, ¿por qué enfocamos esto? Se nota que la percepción que se tiene ahora es a mayor hijos menor el nivel económico que puede llegar a tener una familia joven, cosa que antes no existía.

Esto puede ser una de las principales razones para que una pareja tome la decisión de interrumpir el embarazo, para poder seguir teniendo el mismo nivel económico de vida.

Ahora, hablemos de estadística, ¿Cuántas mujeres abortan y quiénes son? Para responderla debemos saber cuántos abortos tienen lugar en hospitales privados así como públicos, como también saber el número de cifras de abortos practicados en casa o de manera clandestina; no estando todos estos números dentro de las estadísticas.

¿Qué sí podemos saber? Gracias a la ENDIREH 2016, cuántas mujeres que reportaron haber estado embarazadas en los últimos 5 años tuvieron un aborto. ¿Qué no podemos saber? Si este aborto fue inducido o espontáneo. La encuesta reporta que 9.4 millones de mujeres de 15 a 49 años dijo haber estado embarazada en los últimos 5 años; de estas, poco más de un millón dijo haber tenido al menos un aborto.

El 71% de las mujeres de entre 15 a 49 años reportó no haber tenido un embarazo en los últimos 5 años; el 25.5% dijo haber de tenido un embarazo, pero no un aborto, mientas que el 3% dijo haber estado embarazada y haber tenido al menos un aborto durante ese periodo.
Estos tres grupos de mujeres son muy similares en escolaridad, 39% de las embarazadas, sin importar si abortaron o no y el 34% de las no embarazadas estudiaron hasta secundaria, la escolaridad más común. Mientras que 19% de las mujeres que no estuvo embarazada tiene esa escolaridad, tan solo el 14.7% de las que se embarazaron y no abortaron lo tiene.

La diferencia más notoria en escolaridad es en los porcentajes de los tres grupos que estudió hasta primaria; mientras que el porcentaje de mujeres embarazadas que no abortaron y las que nunca se embarazaron es 16.5%, es tan solo de 13.5% para aquellas que sí tuvieron un aborto. Esta diferencia la compensan en parte con el porcentaje que tiene posgrado, que es de 2.3% para las que tuvieron un aborto, pero solo de 1.1% y 1.3% para las que se embarazaron y no abortaron y para las que no abortaron respectivamente.

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