EL ARTE DE LA MANIPULACIÓN POLÍTICA

[pic 1]

EL ARTE DE LA MANIPULACIÓN POLÍTICA

Por Josep M. Colomer

INTRODUCCIÓN

El objetivo principal del trabajo es conocer dar un breve análisis personal sobre los capítulos 4, 5, 6 y 7 de la lectura.

En este resumen se abordan las diferentes etapas y actividades de la política española en los últimos quince años, así mismo se establece un desarrollo de ideas de del autor, partiendo de ello se hace una reseña bastante amplia del tema analizado. De acuerdo con el autor se presenta un análisis amplio y completo.

METODOLOGÍA

En este reporte de lectura sobre el arte de la manipulación política, se realiza una reseña muy breve sobre las votaciones y teoría de juegos en la política española; posteriormente se analizan algunos puntos e ideas de los contenidos expresados del autor.

Nota: Esta obra se publicó por primera vez en Barcelona por EDITORIAL ANAGRAMA. El día 2 de abril de 1990, el jurado compuesto por Salvador Clotas, Hans Magnus Enzensberger, Román Gubern, Xavier Rubert de Ventos, Fernando Savater y el editor Jorge Herralde otorgó el XVIII Premio Anagrama de Ensayo a la obra El arte de la manipulación política. Votaciones y teoría de juegos en la política española, de Josep M. Colomer.

4. UNA TRAMPA SADUCEA

Los diferentes métodos de votación conducen a resultados diferentes dentro del mismo grupo de votantes. Entre las muchas paradojas del voto, que han sido ampliamente estudiadas por la teoría política de la elección colectiva, algunas incluyen las siguientes. Al votar entre varias alternativas, que podemos llamar x, y, z, puede ganar, digamos x, pero si se elimina una de las alternativas perdedoras, digamos como z, el nuevo voto puede dar la victoria a y. En otras palabras, el ganador de la votación puede convertirse en el perdedor si uno de los perdedores originales desaparece o renuncia.

Si, en cambio, se elimina el ganador, x, por ejemplo porque lo que se votan son personas y se trata de seleccionar a varias, la primera ganadora ya se considera seleccionada y se quiere seleccionar otra más, la que antes había quedado en último lugar, z, puede quedar ahora vencedora. Esto pone en duda la fuerza moral de los resultados obtenidos mediante el voto y abre la discusión sobre los criterios para preferir uno u otro sistema de votación.

Los sistemas de votación deberán ser evaluados, pues, por el grado de coherencia que permitan conseguir entre las preferencias. En la práctica, la validez de los resultados tomados por votación suele depender de la aceptación pre- via de las reglas del juego por los votantes, incluida la aceptación de que estas reglas pueden provocar sorpresas en su aplicación.

Imaginemos que cada votante es capaz de ordenar sus preferencias entre las alternativas, del modo siguiente: Si se ponen a votación las alternativas por mayoría simple, cada votante votará por la alternativa que prefiere en primer lugar, es decir, A y B votarán por x, C votará por y, D por w, y E por z. De acuerdo con las reglas del juego entonces vigentes, una vez consumado el cese del presidente del Gobierno, el Consejo del Reino debía proponer una terna de candidatos al rey para que éste escogiera a uno de ellos.

Sin embargo, en caso de que los consejeros hubieran conocido el deseo del rey de nombrar a un reformista, es muy probable que la mayoría de ellos no hubiera aceptado la consigna y hubiera boicoteado la voluntad real. Los dos primeros grupos preferían, lógicamente, que el nuevo presidente del Gobierno fuera alguien de demostrada fidelidad a la dictadura, en principio algún ex ministro de Franco, mientras que la minoría aperturista se inclinaba por alguien que, aun no habiendo sido ministro del dictador, hubiera sido ya ministro del rey con el Gobierno de Arias Navarro.

5. JUEGO ENTRE SUÁREZ Y LOS CONTINUISTAS

La clave para las situaciones es que no se encuentran entre los tres "jugadores" tienen suficiente fuerza para imponer sus proyectos en sí misma. En el Capítulo 2, ningún grupo tiene opciones numeradas individuales (con el posible apoyo de I), III (con el apoyo de IV) y V (puede confiar en VI), tiene un apoyo común que la mayoría puede estimarse. La continuidad de franquista es difícil de ser factible sin el dictador que ha temido a la población y se centra en dos manos todas las facultades. El reemplazo contra la democracia muestra una amplia simpatía. El reformismo de Suarez solo puede lograr objetivos si se acuerda de la reforma de las leyes básicas de acuerdo con el proceso legal y de acuerdo diferente de los principales partidos de la oposición que participan. en las elecciones.  Por lo tanto, cada jugador debe aplicar posiciones interactivas a otros para producir resultados relativamente favorables. Los franquistas pueden gustar a Suárez con mecanismos públicos para gestionar su gobierno y, tal vez, temer a Suarez y la oposición de una intrusión o un movimiento militar. La contraparte puede golpear las huelgas, las protestas y otras formas de movilización por lotes y de una manera, para referirse al máximo peligro de desbordamiento, sus listas a la izquierda.

Debido a que se reescribió, "la estrategia de reforma legal involucra a dos ritmos diferentes y dos requisitos: uno para grupos sociales no hostiles con modo anterior y sus organizaciones, una para Fuerzas Políticas opuestas. Por otro lado, los "jugadores", las personas, para simplificar, llamar "Suárez" en realidad un gobierno disciplinario básico. En su lugar, "Jugadores" que especifiquemos bajo el nombre continuistas es un grupo más y vulnerable; Cada vez que un franquista evoluciona en sus ideas, es sobornado o acepta las reformas, la capacidad del éxito de la continuidad se reduce y por lo tanto, la posición de los otros franquistas, por lo tanto, causó motivación dispersada. Además, dentro de la oposición democrática, hay algunas decadencias y divisiones internas, porque algunas personas, como los demócratas y los liberales, se muestran bastante propicios a participar en la invocación de las elecciones de Suárez, piensan que no se perjudican por las condiciones impuestas; Por lo tanto, la oposición se debilitó y la capacidad de imponer un descanso, por lo tanto ante el peligro de ser derrotado, otros grupos, incluidos los comunistas, que ya se sintieron presionados para unirse a la misma participación.

...