EL IMPACTO DE LA GLOBALIZACIÓN EN MÉXICO

Las antiguas divisiones que existían en el mundo y sus mercados han quedado de lado; la creciente interdependencia ha creado un sistema internacional más abierto, en el cual el poder pierde cada día más fuerza y en el que los valores son compartidos cada vez por más gobiernos y ciudadanos particulares, por ejemplo, el libre mercado europeo, la moneda, etc.

Un aspecto muy importante a tomar en cuenta dentro del proceso de globalización, es aceptar el papel central que ocupa el mercado. Como consecuencia de esto, debemos aceptar que la competencia es un presupuesto básico en el dinamismo del progreso.

Es una realidad el hecho que América Latina enfrenta dentro del contexto de la globalización a grandes retos, como la depreciación de la moneda en los distintos países de Latino América, el aumento relativo de los precios y la privatización. Las sociedades latinoamericanas tienden a ser muy tradicionales, y es por esta razón que es muy difícil que acepten los cambios acelerados y en algunos casos impuestos por los países desarrollados.

América Latina está en el escabroso campo de lo opinable. Por esta razón, los principales argumentos a favor y en contra del desarrollo del proceso de globalización en América Latina.

La globalización es un proceso de gran magnitud y que implica un desafío inmenso para todos países de América Latina. La mayoría de los países de América Latina son pequeños, con economías durante años cerradas, con grandes deficiencias en materia administrativa, infraestructura limitada y más características conocidas por todos.

Desarrollo

Para principios de los años noventa, la proporción de la población mexicana definida como "pobre" era de cerca del 60% (alrededor de 50 millones de habitantes), y la descrita como en estado de "pobreza extrema" se estimaba en unos 20 millones -cifras que para 1996 habían aumentado. En estos sentidos, pobreza no sólo quiere decir un ingreso familiar insuficiente para hacer frente a un nivel mínimo de vida, sino que está asociada a acceso insuficiente a servicios de salud, dificultad para que los hijos menores completen la educación primaria o inicien la educación media, falta de condiciones mínimas de vivienda o techo, falta de calificación y en consecuencia desventaja en la obtención de empleo mejor remunerado. Significa de hecho también desempleo sólo compensado por trabajo parcial, precario o carente de protección social en el gran sector de la economía subterránea o informal.

Desde el punto de vista demográfico y social, se requiere que la economía crezca lo suficiente para absorber en empleo productivo cada año, durante los próximos 10 a 15 años, de 800,000 a 900,000 mil personas en edad de trabajar y dispuestas a trabajar.

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