ELECCIONES 2021 Perú

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INDICE:

¿QUÉ ACTITUDES SE HAN TOMADO EN ESTAS ELECCIONES 2021?        3

ACTITUDES QUE SE HAN PRESENTADO EN ESTAS ELECCIONES        4

SITUACIÓN ACTUAL DE LA REALIDAD PERUANA PRE ELECTORAL        6

POLÍTICA DEBILITADA Y CONFRONTACIÓN CONTINUA ENTRE PODERES:        6

LOS EFECTOS POCO FAVORABLES DE UNAS ELECCIONES EN PANDEMIA        8

A CONTINUACIÓN, PASARE A DESCRIBIR COMO FUE EL PROCESO DE VOTACIÓN COMO CIUDADANO DEL PERÚ DEL AÑO 2021:        8

DESINFORMACIÓN DE LA POBLACIÓN PERUANA RESPECTO A LAS ELECCIONES DEL 2021:        9

SITUACIÓN ACTUAL DE LA REALIDAD PERUANA (PRE ELECTORAL)        10

¿EL CAMBIO ESTÁ EN UNO MISMO?        10

CONCLUSIÓN:        12

¿QUÉ ACTITUDES SE HAN TOMADO EN ESTAS ELECCIONES 2021?

Una de las actitudes más resaltantes que se han dado a notar en estas elecciones 2021, es la responsabilidad que hemos tenido la gran mayoría de peruanos al cumplir con nuestro deber y ejercer nuestro derecho a elegir un representante del país. Pero, a la vez también ha sido prominente la irresponsabilidad en cuanto al tema de seguridad ante la pandemia; esto no solo ha sido en la capital, sino en la gran mayoría de provincias del Perú. Las colas eran exageradamente largas y es lamentable decir que no hubo respeto alguno con el distanciamiento social.

Si bien todos asistieron con mascarilla (algunos con doble mascarilla), protector facial, alcohol desinfectante y su propio lapicero; esto no fue suficiente para estar seguros ante esta terrible enfermedad que hoy en día estamos enfrentando todos los peruanos y países en general.

Otro punto muy decepcionante, fue que muchos miembros de mesa (titulares y suplentes) brillaron por su ausencia en cuanto a la instalación de mesas de sufragio, esto retrasó tiempo considerable para ejercer nuestro voto; fomentando aglomeraciones y desorden en cada centro educativo. Y, está por demás decir que la Policía Nacional no ayudó mucho.

Cabe destacar que hubo un problema lamentable con muchos adultos mayores (personas vulnerables) que querían cumplir con su voto, pero al no haber las mesas de sufragio respectivas, se vieron expuestos a las grandes masas de gente que llegaron horas después. Esto mas que irresponsabilidad por parte de los ciudadanos que fueron elegidos como miembros de mesa; fue a la par descuido y falta de organización de la Oficina Nacional Procesos Electorales.

Quisiera encontrar más puntos positivos en estas elecciones 2021, pero está muy difícil. En primer lugar, no debió haber elecciones este año, estando en la situación que estamos. Esto es más que obvio que va a generar nuevos brotes de contagio en muchos lugares del país, las aglomeraciones fueron inevitables para aquellos ciudadanos descuidados que siguen con esa mentalidad de que la COVID-19 acabará pronto.

Y muy aparte que cada uno ha elegido a un candidato bueno o no, estas elecciones han sido una irresponsabilidad y descuido total por parte de la propia población peruana.

ACTITUDES QUE SE HAN PRESENTADO EN ESTAS ELECCIONES

La relación entre el elector, el político y contrincante nos llevó a ver una realidad política muy compleja. Siendo todos los peruanos testigos de la refundación de distintos partidos bajo otras denominaciones, con el fin de llegar a gobernar.

Actualmente contamos con partidos políticos que arrastran una serie de problemas durante muchos años atrás, cambiando sus ideologías e incluso instituciones por las que eran representados y poder así presentarse como una imagen nueva y de ‘‘cambio’’.

Sin duda las campañas electorales siempre terminan siendo tensas y estas aún más considerando que estamos en medio de una pandemia que no permitió a los candidatos hacer campaña libremente, con mitin y reuniones electorales. El candidato tuvo que mantener los protocolos y límites en bien de sus simpatizantes y el suyo.

A lo largo de estos meses de campaña nos hemos podido dar cuenta de los modos en los que los políticos usan el convencimiento, ofrecimientos económicos y discursos populistas, los cuales generan un trasfondo de negociación entre el candidato y el elector, logrando así que las personas simpaticen más con el candidato que con el movimiento político.

Después de una serie de crisis política que vivió nuestro país, la incertidumbre por quien llegue a palacio fue grande y aún lo es. Era clara la posición de los peruanos, el no creer en los políticos tradicionales al no sentirse representados, entonces los candidatos empezaron a atraer simpatizantes sin creer en sus posiciones ideológicas. El candidato no revelaba sus intereses individuales, pero sí acomodaba las necesidades individuales de los lectores en uno solo.

No faltaron los ‘‘golpes bajo’’, de un candidato a otro, sacando a relucir los peores papeles con la intención de desacreditarlos, mientras otros avanzaban en silencio, sin mucho ruido, pero a paso firme. Sin duda los debates fueron un punto clave para muchos electores que no tienen las posibilidades de leer los planes de gobierno, debates que para una parte de la población fueron un poco más que un intercambio de alegaciones personales en vez de exposición de propuestas, y para la otra parte fueron momentos de decisiones claves para elegir o convencerse del candidato con el que se sentirían representados.

Finalmente hemos terminado presenciando una situación política de cambio por una parte y por otra de incertidumbre y preocupación combinada con miedo como sucede en todo lo nuevo que se nos presenta, esto no es más que una muestra clara en lo que la gente ya no cree y ya no quiere.

Lo que pasó el 11 de abril, es un golpe a las élites políticas y de poder que predominaron por mucho tiempo y no pudieron escuchar ni atender las necesidades de todos los peruanos, no hablo de las necesidades de la minoría, hablo de ese Perú profundo que con sus votos alzaron la voz en señal de auxilio, ese Perú que no se manifiesta en redes porque no tiene acceso a internet, techo seguro o comida 3 veces al día. Que la persona por la que ellos se sienten representados tenga las capacidades para asumir un cargo tan importan es el dilema, porque afecta directamente a nuestro futuro, pero sin importar quien termine siendo nuestro presidente el Perú se puso de manifiesto y hay que escucharlo, no los silenciemos. Nos quedó claro que tenemos bien ganada la frase: ‘‘Existe la realidad, la ficción y el Perú’’.

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