Economía Social

Análisis de “Economía social y solidaria”-Jorge Luis Coraggio

El gran paradigma capitalista que reina en el mundo globalizado, está empezando a entrar en crisis, puesto que, aquellos pueblos, sociedades y naciones que han sido afectados y excluidos de las grandes instituciones que manejan los poderes económicos, se dan cuenta de la mala práctica y los resultas que ha ocasionado llevar ciertas políticas económicas, muchas veces se nos han impuesto, a aquellos países subordinados y dependientes de los llamados países desarrollados.

El neoliberalismo ha generado sociedades extremadamente desiguales, en el que genera exclusión, puesto que buscan generar ganancias y las utilidades quedan para unos pocos. El dinero se concibe como un medio para generar más dinero. Con todo esto, debemos pensar y actuar en una nueva forma de generar una economía más igualitaria, pues sería en vano pensar que, con la crisis del capitalismo al fin podremos salir del modelo de acumulación en el que todo es una mercancía. Debemos pensar en una nueva reorganización democrática en el que todos puedan satisfacer sus necesidades, en el que haya cooperación, hablamos de una Economía Popular y Solidaria, en el que existan redes de ayuda mutua (Coraggio, 2009), y trabajo para todos, y estos trabajadores puedan acceder a los medios de producción.

Este nuevo esquema, deber ser implantado desde las pequeñas organizaciones domésticas, a los pequeños articulaciones y asociaciones; y sean ellos quienes inicien a integrar una sociedad más justa, pensando en el desarrollo de todos, sin discriminación, y sin explotar el trabajo ajeno, habiendo un pago o salario justo. Es importante pues competir contra el modelo capitalista, siento autosuficientes y no dependientes de países que buscan sacar beneficios o costa de nuestras necesidades. Esta nueva economía social debe tener una redistribución en el que todos puedan acceder a lo necesario, evitando una diferencia económica que iría minando la cohesión social. Esta autosuficiencia productiva debe legar a tener un consumo responsable, habiendo un intercambio reciproco.

Como lo concibe Coraggio (2009, 2011), la economía social y solidaria está en el centro de una economía mixta: con una economía pública, en la que participan las empresas públicas, el Estado y sus municipios; la economía privada que son empresas y grupos económicos; y la economía popular, en la que nos referimos a economías domésticas, comunidades, redes de ayuda mutua y asociaciones productivas de hecho. Con acuerdos y planes estratégicos, a partir de esta economía mixta, se podría generar presupuestos participativos, y cooperativas y asociaciones jurídicamente constituidas.

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