Efectos del coronavirus en el comercio

Actualmente el mundo vive un estado de alarma debido a la enfermedad COVID-19, la cual es causada por el nuevo virus denominado SARS-CoV-2, el cual ha sido declarado como una pandemia por la Organización Mundial de la Salud (OMS) el 11 de marzo de 2020. Se entiende como pandemia una epidemia en una gran área geográfica internacional. En el sentido actual, afecta a una parte particularmente grande de la población mundial. Por otro lado, una enfermedad endémica generalizada con un número estable de personas infectadas no es una pandemia. Una pandemia es una epidemia que se extiende a través de las fronteras internacionales y generalmente afecta a las personas a nivel mundial.

Las consecuencias de una pandemia incontrolada pueden ser muy significativas, como fue el caso de la peste negra en Europa y Asia, donde mató en pocos años a decenas de millones de personas y tuvo un fuerte impacto en el demografía, o más recientemente con infección por el virus de la inmunodeficiencia humana (VIH) que afecta gravemente el África subsahariana.

Particularmente el COVID-19, se transmite principalmente durante el contacto cercano y por pequeñas gotas producidas cuando los infectados tosen, estornudan o hablan. Estas pequeñas gotas también pueden producirse durante la respiración, pero caen rápidamente al suelo o superficies y generalmente no se propagan a través del aire a grandes distancias. Las personas también pueden infectarse al tocar una superficie contaminada y luego la cara. El virus puede sobrevivir en las superficies hasta por 72 horas. Es más contagioso durante los primeros tres días después del inicio de los síntomas, aunque la propagación puede ser posible antes de que aparezcan los síntomas y en las etapas posteriores de la enfermedad.

Además de sus efectos preocupantes en la vida humana, la nueva cepa de coronavirus (COVID-19) tiene el potencial de desacelerar significativamente no solo la economía china sino también la economía global. China se ha convertido en el centro de fabricación central de muchas operaciones comerciales globales. Se espera que cualquier interrupción de la producción de China tenga repercusiones en otros lugares a través de cadenas de valores regionales y globales.

Con la mayoría de economías estancadas y con la producción a cero, el impacto sobre la economía mundial se está empezando a notar. Por este motivo, el intercambio comercial y de transporte de mercancías se está viendo altamente castigado por culpa del virus.

En el caso del transporte de mercancías, el impacto también ha sido muy elevado. Si bien es cierto que el transporte de productos de primera necesidad está garantizado por los diferentes gobiernos, con el objetivo de abastecer a la población, el transporte de otras mercancías, ya sea por vía aérea, marítima o terrestre, está en su mayoría paralizado.

Todo esto se puede notar con las estadísticas que reflejan la reducción de importaciones y exportaciones de distintos productos (incluida la comida y las medicinas) en los diversos países, lo cual es algo riesgoso para la economía mundial así como también para la salubridad internacional.

Todo esto quiere decir que las aduanas se ven fuertemente afectadas por la pandemia del COVID-19, pero ¿qué es una aduana? La aduana es un servicio público provisto por el gobierno del país respectivo que recauda los aranceles gravados sobre los bienes importados y proporciona medidas de seguridad a través de las cuales las personas entran y salen del país. Un bien / servicio público se define como no rival y no excluible, es decir, no se pueden evitar las aduanas al salir o ingresar a un país.

Las misiones de las aduanas varían mucho de un Estado a otro, pero casi siempre es una institución económica y financiera con carácter fiscal y de seguridad. Las aduanas se encuentran situadas en puntos estratégicos. Estos puntos estratégicos son, por lo general, costas, fronteras, terminales internacionales de transporte de mercancía como aeropuertos o terminales ferroviarios.

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