El México que quiero

 “El México que quiero”[pic 1][pic 2][pic 3][pic 4][pic 5][pic 6][pic 7]

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Ensayo[pic 20][pic 21][pic 22][pic 23][pic 24]

“Todo en México tiene para mí una fuerza secreta que me seduce. Su tradición y su esperanza en el futuro, la vida de su pueblo, la riqueza de su paisaje”.

-  Alfredo Zalce (pintor mexicano)

México es mucho más que un país; es más que tierra y agua; más que política y economía; mucho más que dinero y poder; y aún más que recursos naturales. México es especial, sin lugar a dudas el único en su especie en todo el universo, no hay ningún otro país como él, su historia un poco desastrosa pero triunfante, ha definido lo que es hoy en día junto a los mexicanos. Nuestra nación no es nada sin nosotros y nosotros no somos nada sin nuestro preciado país, es una realidad que México ha pasado a formar parte de nosotros, crecer en ésta nación es sin lugar a dudas algo bastante especial que tarde o temprano hará que te enamores de él en todos los aspectos. Su gastronomía, su paisaje, sus maravillas, su historia, su arquitectura, su gente, su deporte y su entusiasmo a salir adelante, son algunas cosas de las que te quedaras maravillado. Sin embargo, aunque hoy en día México es un país extraordinario al igual es una realidad que no es perfecto, la inseguridad, la corrupción, el egoísmo, la deshonestidad y la injusticia, son al igual unas de sus características que lo determinan hoy en día. La ignorancia le ha hecho sombra a México desde hace ya bastantes años, ha formado un ciclo del cual ya hasta parece imposible salir, no hay ni un comienzo ni un final, todo está entrelazado. México necesita a alguien que rompa este ciclo para comenzar de nuevo y hacer las cosas bien, este alguien no tiene que ser una persona puede ser una organización o un instituto. Las personas de cambio unidas, sustentadas en el gran amor que tiene México y en la búsqueda de la felicidad, tienen que encontrar la forma de solucionarlo y de hacer a México el país que nuestros héroes nacionales alguna vez soñaron ver. Así que, teniendo esto en cuenta, ¿La felicidad de los mexicanos concuerda con la idea de nuestros héroes nacionales? y ¿Cuáles son algunas de las posibles soluciones para sacarnos del pozo y ser todos felices?

México nació en 1821 a manos de los primeros héroes nacionales con las mejores intenciones, con el sueño de lograr un lugar mejor en donde todos los mexicanos tuvieran los mismos derechos, las mismas oportunidades felicidad. Sin embargo, lamentablemente como podemos ver ahora los mexicanos no estaban lo suficientemente maduros para afrontar tal responsabilidad originando de esta manera la guerra, el desorden y la muerte, en nuestro preciado país. Debido a las circunstancias que en ese tiempo se estaban viviendo en México y en todo el mundo claramente, la felicidad iba a ser algo muy difícil de alcanzar. El dinero, el poder y sobre todo el placer eran la base de la “felicidad” del mundo en aquellas épocas, con claras excepciones como podría ser el padre de nuestra Independencia Miguel Hidalgo o el héroe revolucionario Francisco I. Madero. Sin embargo, afortunadamente con el pasar de los años los mexicanos y el mundo, fueron concientizando e intelectualmente evolucionando, cada vez eran más y más las personas que querían el bien hacia los demás. El humano paso a ser cada vez más humano y mucho menos animal, gracias simplemente a personas que buscaban contagiar su alegría y entusiasmo por causarle un bien a la sociedad. Al igual la patria paso a tomar un lugar en el corazón de todos los mexicanos, para el siglo XIX y XX al mexicano le significaría un honor pelear por su nación ya sea contra los extranjeros o contra los mismos mexicanos, buscando siempre lo mejor para su país. Al momento de que se democratizó México, nuestros héroes nacionales realizaron una apuesta muy arriesgada ya que, aunque el orden y la justicia representaban un grandísimo bien para aquella época, en cualquier momento este poder podría caer en manos erróneas y aún más cuando el pueblo no está lo suficientemente maduro. Y así fue como nació la primacía o, mejor dicho, la dictadura perfecta del ahora denominado Partido Revolucionario Institucional.[pic 25][pic 26][pic 27][pic 28][pic 29]

Aunque el mal ya existía desde hace mucho tiempo en México, me atrevería decir que el PRI fue quien lo consolido y apoyó durante todos los años que estuvo en el poder, formando así una clara pérdida de valores en la sociedad y por lo tanto infelicidad en cualquier estado de la nación. Es una realidad que en México el mal reinó y reina actualmente sobre el bien, causando pobreza, corrupción, hambruna o, en otras palabras, antivalores. Los pocos mexicanos que pudieron y mantienen su mente recta han intentado realizar un cambio en la sociedad, esto se ha visto más claramente en los distintos enfrentamientos que el pueblo ha tenido con el gobierno durante los últimos años. El movimiento estudiantil de 1968 es el más claro de estos y cómo podemos ver ahora, el gobierno triunfó brutalmente sobre los estudiantes a base de la fuerza y de la imposición. Actualmente, es un hecho que la fuerza bruta ya no es más una vía para alcanzar el cambio, la solución está en promover y proponer el bien, los valores morales y las virtudes esenciales para el desarrollo humano. El problema de México no está en un mexicano ni en dos, está en todos nosotros que nos hemos cegado por el mal pero que unidos, claramente podremos vencerlo.

Pero tampoco crean que nuestro querido México está tan mal ya que según al Informe Mundial de la Felicidad 2017, realizado por la ONU indica que nuestra nación ocupa en este ranking el lugar 25 de 155 países, posicionándolo como el segundo más feliz de toda Latinoamérica después de Costa Rica. Esto demuestra que México en sí es un pueblo bueno, amable y feliz a pesar de la corrupción, de la pobreza y de la hambruna que muchos mexicanos tienen que sufrir en su día a día en gran parte a la cultura y forma de ser que tenemos muchos mexicanos. Las naciones que ocupan los primeros lugares en estos rankings son todos europeos como, por ejemplo, Noruega, Suiza, Finlandia e Islandia. Todos de ellos presentan algo en común, el gran nivel de educación, según un estudio hecho por universitarios de Harvard esto se debe primordialmente a que desde una temprana edad no les enseñan sus profesores a ser los mejores en lo que se dediquen, sino que, a ser lo más felices que puedan. En un video realizado por los mismos universitarios, un profesor finlandés de matemáticas recalca como a sus estudiantes les enseña a ser felices poniéndoles el ejemplo de como con una suma o una resta pueden hacer a otra persona feliz. Al igual estos sistemas educativos son tan eficaces debido a que les dan más libertad a sus estudiantes de atender sus gustos, adquiriendo así un gusto e interés por aprender en su día a día. Gracias a que les enseñan esto a sus alumnos en los países europeos, en especial a los que están situados más al norte, tienen gran paz y tranquilidad en su nación, tienen un ciclo de felicidad que difícilmente será interrumpido por un largo periodo de tiempo.[pic 30][pic 31][pic 32][pic 33][pic 34][pic 35]

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