El problema del racismo en el Еcuador

¿Es o no el racismo y la falta de identidad un gran problema en el Ecuador?

S

omos un país de aproximadamente 14 millones de habitantes que al parecer aun no nos acostumbramos a nosotros mismos y que por lo tanto no nos aceptamos mutuamente. Estamos llenos de “nadies”, personas marginadas a las cuales discriminamos día adía. Y hemos llegado hasta el punto en que más del 80% de niños ecuatorianos hubiesen deseado nacer en otro lugar. Nuestra comodidad, confianza, conformidad aunque valentía nos hace ver como un país con una sociedad mediocre y desdichada pues vemos nuestra propia descripción cultural como insulto y no como una fuente de diversidad.

El ecuador es aun considerado como una nación joven, uno de los cuantos casos únicos de la historia. Pues ya que fuimos conquistados por españoles nuestra cultura aborigen fue alterada significativamente. La verdad es que no fuimos conquistados por la monarquía española, sino por los hidalgos, gente de clase media que forma parte de la base de nuestra cultura. Es decir que aquellos “blancos” o “patrones”, en su país natal no eran más que artesanos y pequeños comerciantes en busca de nuevas oportunidades.

Es cierto que el Ecuador no está solo conformado de mestizos, pues tenemos indígena y negros también, que a pesar de que en la antigüedad fueron excluidos de toda sociedad, ahora luchan por sus derechos y por preservar viva su cultura. Hoy en día los indígenas ocupan un lugar importante en nuestra vida diaria y aunque es difícil acostumbrarse a verlos como iguales, poco a poco el cambio será más visible, pues ser indígena o negro debería ser un orgullo en una tierra llena de mestizos.

Los llamados “nadies” son gente que vemos en todas partes, a toda hora y son de cualquier sexo. Estas personas son aquellas que nos brindan un servicio, el cual consideramos como algo obligatorio y no lo reconocemos como el favor que es. Ya que nadie pregunta por el nombre del conserje o del guardia, personas que día a día están ahí para nosotros y a las cuales ni saludamos y peor vemos debemos decir que estamos infestados de “nadies” que jamás conoceremos.

Nuestros niños con su corta edad ya han determinado que el Ecuador no es un buen lugar para vivir y peor para nacer, ¿no es esta la verdad sobre la realidad?, ¿acaso es esto algo nuevo en las nuevas generaciones? Pues no, esto es fruto del nacionalismo de nuestro país que desde corta edad es sumamente bajo y triste. Pero también es cierto que aquellos ecuatorianos que han tenido la oportunidad de vivir en otros países se vuelven altamente nacionalistas, ya que presumen de sus costumbres y cultura. No es esto una razón más para considerarnos únicos, pues siempre se extraña el hogar en donde se creció y vivió.

Las características comunes de un ecuatoriano pueden ser muchas, ya que somos según algunos: vagos, conformistas, alegres, indecisos,

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