Embarazo adolecente en Chile en zonas de mayor vulnerabilidad

Nombres: Francisca Cangas

                  Solange Moreno

Embarazo adolecente en Chile

en zonas de mayor vulnerabilidad

El embarazo adolecente es aquel que se produce cuando las jóvenes están entre los 10 y 19 años de edad, aproximadamente desde los 13 años su cuerpo esta biológicamente capacitado para tener un bebe sin embargo esto no significa que estén preparados para hacerlo.

Distintas organizaciones como CEPAL, Naciones Unidas y UNFPA hablan de ello y dicen:

 “El embarazo adolescente entraña un conjunto de adversidades para los y las adolescentes, especialmente para las mujeres, y también para el bebé y otros actores como los padres de los y las adolescentes.” (Asociación chilena de Protección de la Familia (Aprofa), 2017).

Las consecuencias para las futuras madres adolescentes pueden darse a mediano y largo plazo algunas de ellas son:

“Mayores complicaciones de salud durante el embarazo, parto y puerperio, las que se acentúan a medida que disminuye la edad de la madre;  la baja en el desempeño escolar y el aumento de las probabilidades de deserción escolar; mayores dificultades para una inserción laboral adecuada;  eslabón en la reproducción intergeneracional de la pobreza y la desigualdad social;  eslabón en la reproducción intergeneracional de las inequidades de género;  barrera para la movilidad social ascendente; exigencias de tiempo y recursos adicionales para los progenitores y sus familias de origen.” (Jorge, 2017).

En chile es una problemática latente porque en las comunas con mayor pobreza o con mayores índices de vulnerabilidad y con menor nivel educativo es donde más existen casos de embarazo  adolescente,  siendo así, la falta de información sexual, una de sus causas, en donde las adolescentes creen que por ser  su primera experiencia o relación sexual no les puede ocurrir nada, como lo destaca la Asociación chilena de Protección de la Familia (Aprofa), la cual dice:

“La falta de educación aún tiene “rostro de pobreza”, donde en sectores con menores recursos se nota la diferencia en información y la calidad de los servicios.” (Asociación chilena de Protección de la Familia (Aprofa), 2017).

 Además de que las adolescentes suelen dejar la escuela, lo que genera un límite en su crecimiento personal, afectando también no solo a ellas, sino, a las personas que tienen en su entorno, es decir, mayoritariamente a sus padres, los cuales son muy fundamentales en estos procesos, ya que, en algunas circunstancias  al nacer el bebé ellos deciden apoyarlas económicamente, lo que viene siendo un gasto no menor en el cuidado de la madre y bebé, más los materiales requeridos. También en algunos casos reciben una respuesta negativa, al no tener apoyo suficiente de su pareja, al abandonarlas y no aceptar hacerse cargo de su hijo, dejando que enfrenten solas esta situación, o no tener el apoyo de su propia familia, como sus padres, al hacer que las adolescentes abandonen el hogar, y que busquen por ellas mismas alguna solución, o individualmente dejan el hogar, por miedo o por sentirse una carga para su familia, la cual no tiene los recursos suficientes como para cuidar a otro ser, quedando así completamente vulnerables, aunque gratificantemente hoy en día existen diferentes instituciones que cuentan con un equipo profesional, las cuales las reciben y  les entregan apoyo hasta cierto periodo, preocupándose de orientar y  acoger a estas madres adolescentes, ayudándoles a asumir su maternidad, algunas también pueden terminar sus estudios, o encontrar trabajos, en fin, generando que puedan reinsertarse en la sociedad, facilitándoles el camino, pero que a la vez  no deja de ser un enorme sacrificio.

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