Ensayo sobre las vulnerabilidades a la seguridad Causado por los dos robos realizados aeropuerto A.M.B. los años 2014 y 2020

Ensayo sobre las vulnerabilidades a la seguridad

 Causado por los dos robos realizados aeropuerto

A.M.B. los años 2014 y 2020

Introducción

A medida que pasan los años la seguridad en todas sus ramas ha ido ganando terreno dentro de las empresas, que su objetivo sea el desarrollo y su crecimiento como tal, no tan solo las grandes, medianas y pequeñas empresas deben levantar sus negocios basados en la seguridad sino que también los hogares que son un blanco habitual de bandas delictuales.

A continuación analizaremos dos incidentes, el primero ocurrido el 14 de agosto del año 2014 y el segundo un 9 de marzo del año 2020, sector instalaciones del aeropuerto A.M.B., los cuales fueron de similares características que estuvieron planificados por delincuentes  expertos y avezados, con capacidad de análisis, conocimiento del área y buenos agentes captadores, que gracias a esas características lograron el éxito de lo planificado.

Por otra parte analizaremos las falencias de las normas de seguridad, que llevaron a que los delincuentes tuvieran éxito.

Desarrollo

Para comenzar analizaremos al “enemigo”, saber cómo fue capaz de vulnerar la seguridad y sus distintas barreras, esto con el fin de encontrar las vulnerabilidades del sistema y poder corregirlo.

El robo del año 2014, su líder Alexis Niñoles Rivas, un delincuente el cual comenzó a temprana edad a delinquir, ya a los 18 años recibió su primera condena por robo de vehículo, según los informes policiales era una persona, inteligente, calculador, estudioso, egocéntrico y se especializaba en clonar vehículos.

La planificación, inició dos años antes en donde Alexis comenzó a reclutar personas para su organización criminal e iniciar el plan del robo, fue así que reunió a 8 personas para su fin.

Durante el tiempo de planificación es muy probable que realizó observaciones al reciento en cuestión, sumado a esto verificó al desplazamiento de los camiones de valores que transportaban el dinero hacia el aeropuerto sus horarios por donde transitaban etc.., obteniendo como resultado las debilidades a la seguridad del recinto que finalmente vulneraron, además de esto obtuvo como y donde descargaban el dinero, la cantidad de personas que lo resguardarían y si estas utilizaban armamento.

Según lo descrito en los párrafos precedentes, se puede analizar lo siguiente, hubo varias vulneraciones que facilitaron el ingreso de los delincuentes al reciento por un sector donde no había personal de guardias. Lo primero, dentro del estudio de seguridad del reciento es probable que no se haya considerado el poco resguardo que mantenía el acceso que fue  utilizado por la banda delictual, acceso que manejaba el servicio agrícola y ganadero (SAG), para el traslado de animales, el cual solo se mantenía cerrado por un candado el que fue desarrajado fácilmente por los delincuentes para hacer ingreso al reciento.

Otra observación, el desconociendo por parte de los guardias del protocolo aeronáutico  DAP 1703,  que les exige a las empresas de transporte de valores “asegurar un control efectivo del cargamento desde la bodega hasta la aeronave”, ellos llevaron el dinero aun cuando faltaba más de una hora para que el avión arribara al área de carga, facilitando la acción de los delincuentes.

Sumado a lo anterior cabe destacar que los guardias no portaban armas, debido a una normativa de la DGAC, que no permite el ingreso de armas al área segura del aeropuerto.

Aunque no compete a la seguridad del aeropuerto, se puede considerar que el desplazamiento del camión de valores siempre lo hacía al mismo horario y por la mima ruta, haciendo de este una rutina que fue aprovechada por los criminales.

Como nota al margen, en el mes de febrero del año 2015, el portal de investigación CIPERCHILE^[1], publicó una nota donde denunciaba graves falencias de seguridad en el aeropuerto de Santiago, en ese artículo se investigaba la entrega de credenciales fraudulentas a guardias privados que tienen acceso a zonas restringidas del terminal aéreo. En pocos días ya se había confirmado que dos personas tenían credenciales de la DGAC sin haber cumplido con los requisitos exigidos.

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