Estado neoliberal

2. EL ESTADO NEOLIBERAL

  2.1.  LA FORMA DEL NUEVO ESTADO

               Un principio fundamental del cual se consideraban partidarios los neoliberales, tal cual señala Fernando Escalante en su libro “Historia Mínima del Neoliberalismo”, consistía en mantener las decisiones básicas referentes a la economía fuera del juego democrático incontrolado, o siendo más concretos en otras palabras, lejos de un régimen político democrático ilimitado. No obstante, ¿por qué se opta por mantener la economía lejos de un gobierno democrático? Como bien se conoce, un régimen de carácter democrático se caracteriza por permitir y motivar la participación del pueblo; es decir, la participación de las mayorías, sin embargo, este aspecto puede resultar contraproducente para lo que concierne a la libertad económica. Como lo señala Escalante (2019) “la libertad económica estará amenazada siempre que exista una asamblea democrática, un gobierno democrático…” (pág. 237). Von Hayek, uno de los principales representantes de la teoría neoliberal, y citado también por Escalante (2019), pregonando acerca de la importancia de la libre competencia en el desarrollo económico, señalaba que esta misma “implica siempre que un número limitado de personas obligue a la mayoría a hacer algo que le desagrada, sea trabajar más, alterar sus hábitos, o desarrollar sus actividades con mayor tenacidad o atención” (Escalante, 2019, p.237); entonces, presentándose aquellas mencionadas situaciones producto de libre competencia en el mercado, la población mayoritaria se manifestará contrariamente a ello o se resistirá y tratará de evitar el desarrollo de la misma. Un notorio ejemplo de lo cuan perjudicial puede llegar a convertirse la participación de las mayorías en los asuntos económicos, siempre desde el punto de vista de los teóricos neoliberales, es la presión que ejercen muchas veces los ciudadanos profesionales en sus gobernantes para un aumento en sus respectivos sueldos. Producto o derivación de aquella presión, los gobiernos ordenan la emisión de gran cantidad de billetes para sobrellevar ese aumento salarial y pues aquellos billetes no cuentan con respaldo de oro suficiente, por lo que a largo plazo se produce una inflación que resultaría perniciosa para todo un país. Aquella situación se suele presentar, comúnmente, las naciones que se encuentran gobernadas por un régimen democrático incontrolado. Además, adaptándonos a la realidad, conocemos que aquellos países son dependientes de las grandes potencias económicas; es decir se  encuentran en una relación de dependencia con los grandes inversores y dueños de enormes empresas encargados de utilizar su capital para el desarrollo y comercialización de bienes en las ya mencionadas naciones, por lo que no les convendría que se implemente alguna política económica como un aumento de sueldo en la mano de obra, ya que sus intereses de enriquecimiento no se van a satisfacer en la cantidad que ellos anhelan, por lo que optan alejarse de aquellas naciones en los cuales se produce aquella situación y entonces, si el contexto económico ya desde un comienzo era crítico en esos países, entonces a causa del alejamiento de los grandes inversores, la situación económica se agrava más. No obstante, aquello no es punto relevante de este escrito, puesto que ya estaríamos haciendo mención de los intereses neoliberalistas, cuando en realidad nos queremos centrar en idean que estos mismos pregonan, el cual es el desacuerdo hacia una democracia sin control.

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