Estilos de Liderazgo en la Administración

Estilos de Liderazgo en la Administración

El liderazgo es un tema de suma importancia dentro de la administración, pero antes de abordar el tema es necesario definir algunos términos: Liderazgo: autores como Harry Truman, establece que el liderazgo es la capacidad de hacer que tanto hombres como mujeres hagan con gusto lo que no les gusta. ^[1]

Líder autocrático: aquel que ordena y espera cumplimiento, es dogmático y positivo.^[2]

Líder democrático o participativo: consulta con sus subordinados sobre las acciones y decisiones propuestas.^[3]

Líder liberal: utiliza muy poco su poder otorgando a sus subordinados alto grado de independencia en sus operaciones.^[4]

El correcto ejercicio del liderazgo es fundamental en todos los tipos de organización. Se sabe que detrás de todo logro u objetivos que se obtienen dentro de una empresa existen grupos de personas que actuaron de forma coordinada, y al frente de ellos está el líder, que supo ejercer de buena manera su papel. Sin embargo, dentro de una organización existen diferentes estilos de líderes, uno de ellos es el autócrata que posee poder ilimitado sobre determinado grupo, sin embargo aunque este tipo de liderazgo provee múltiples ventajas como la eficiencia, consecución de resultados a corto plazo, también presenta múltiples desventajas: puede ser frustrante y estresante para los trabajadores, hay pocos elogios y el líder sólo se comunica con el grupo cuando se cometen errores.

También se pueden ejercer dentro de una organización el liderazgo democrático, este prioriza la participación de su equipo, cumple con diferentes deberes como potenciar la discusión del grupo y agradece las distintas opiniones que genere su equipo de trabajo, un líder democrático puede logran buenos resultados en el trabajo de equipo, uno de ellos es que fomenta la participación activa del grupo y busca el bienestar de su equipo de trabajo lo que permite que cada colaborador se sienta identificado con la organización.

Por otro lado, tenemos a los líderes liberales, conocidos también como los de “rienda suelta”, este otorga a sus subordinados alto grado de independencia en sus operaciones,  lo anterior no siempre trae buenos resultados ya que en muchas ocasiones puede promover la desunión de su equipo de trabajo y promueve acciones de desorden y pérdida de tiempo.

Independientemente de cuál sea el estilo de liderazgo adecuado dentro de una organización, los líderes deben orientar el rumbo de sus subordinados y desarrollar actitudes y un autoconcepto más positivos, porque estos rasgos se perciben, y se proyectan hacia los seguidores.

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