Exlusión Social y Pobreza

La lectura nos permitió comprender, porque el concepto de exclusión social y pobreza generalmente son empleados como sinónimos. Construidos y reconstruidos con el paso del tiempo, en búsqueda de adaptarse a las demandas de cada contexto, y como el primer término mencionado involucra más dimensiones para entender las situaciones que vulneran la posibilidad de una vida digna en las personas, así también, expone diversos factores causantes de este conflicto social.

Como lo mencioné anteriormente , las personas se enfrentan a pobreza o exclusión social por distintas circunstancias de índole cultural, político o económico, sin embargo, para el presente trabajo me centraré en la construcción cultural o ideológica de la sociedad frente a esta realidad ; que viven muchas familias o personas.

En toda región encontramos grupos etiquetados como clase baja o incluso en categorías menores a esta, al afrontar condiciones que no les permiten mantener o llevar los modos de vida promedios o “aceptables”, correspondientes a esa sociedad. Siendo este punto una problemática que da paso a la construcción de concepciones erróneas en parte de la población no afectada, es decir, da paso a la normalización del inconveniente.

Observar a lo largo de las décadas como este fenómeno aumenta el porcentaje de perjudicados, y presenciar de forma cotidiana todas las repercusiones como trabajo infantil, mendicidad, desempleo o, delincuencia; hacen percibir a la pobreza y exclusión social como una repercusión colateral del funcionamiento social que siempre va a estar presente. Lo cual , puede llevar a encasillar o restringir al grupo afectado a este modo de vida, sin ofrecer oportunidades y desensibilizar todos los derechos humanos, y vidas dignas quebrantadas, promoviendo y justificando la injusticia social.

Desde mi perspectiva, se vincula con el tema I.4 de la unidad I, perspectiva del rol, “el concepto de rol está directamente relacionado con el de posición o estatus de una persona en un determinado sistema social” adicionando a esta reflexión el concepto de normas generales mencionado por Deaux, Dane y Wrightsman (1993) “expectativas generalizadas acerca de la conducta que se aprenden en la interacción con otros miembros de la sociedad”.

Como lo destaqué anteriormente, dentro del día a día existen muchos factores que forjan nuestros pensamientos de forma negativa o positiva dependiendo de las circunstancias y subjetividad de cada persona, sin embargo, elementos como medios de comunicación, falta de conocimiento, estereotipos, etc… pueden incidir en marginar a la población, concibiendo como ilegítimo la posibilidad de acceso a mejor educación, empleos formales y dignos, viviendas y entornos estables, entre otros.

Una vía muy eficaz para superar estas crisis es el conocimiento. La educación de calidad para las generaciones de niños

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