FORMATO DE PRESENTACIÓN PROTOCOLO EXPOSICIONES

PONTIFICIA UNIVERSIDAD JAVERIANA[pic 1]

FACULTAD DE CIENCIAS ECONÒMICAS Y ADMINISTRATIVAS

ESPECILIZACIÒN EN GERENCIA DE MERCADEO

REPONSABILIDAD SOCIAL Y EMPRESARIAL

JOSE SIMÒN ARAGÒN GARZÒN

ALGO VA MAL, TONY JUDT

FORMATO DE PRESENTACIÓN PROTOCOLO EXPOSICIONES

El análisis profundo acerca de cómo funcionan los sistemas políticos, económicos, religiosos y sociales ha sido un trabajo realizado de manera permanente a lo largo de la historia de la humanidad. No por ello, la labor de pensar y criticar la forma en la que las distintas sociedades han desarrollado sus estructuras e instituciones sociales se puede considerar finalizada.

Tony Judt (1948-2010) historiador y escritor británico, autor del texto ‘Algo va mal’ que a continuación se tratará, es considerado como uno de los críticos y analistas de los sistemas políticos y económicos europeos más polémicos en las últimas décadas. Algunos de sus textos más importantes son: ‘Una gran ilusión?: Un ensayo sobre Europa’ (1996), ‘El refugio de la memoria’ (2010) y ‘Pensar el siglo XX’ (2012).

Judt, en la introducción titulada ‘Guía para perplejos’ exhibe una cita del filosofo social Alexis de Tocqueville  la cual aborda, cuestiona, y resume en gran medida el objetivo principal de este apartado. “No puedo evitar temer que los hombres lleguen  a un punto en el que cada teoría les parezca un peligro, cada innovación un laborioso problema, cada avance social un primer paso hacia una revolución, y que se nieguen completamente a moverse” (Tocqueville; citado por Judt, Pág. 17).

Tony Judt propone como tesis central, que existe la necesidad de una revolución intelectual en tanto, se hace necesario repensar el papel que juega el estado en la regulación de los mercados en el actual sistema capitalista. Para justificar esta idea, el autor se vale de 5 argumentos principales desde donde ejemplifica una serie de situaciones que le permiten validar la idea que ‘El Estado puede desempeñar un papel mayor en nuestras vidas, sin amenazar nuestras libertades y por lo mismo, se hace necesario repensar el tipo de Estado que queremos.’ (Judt, Pág. 23)

El autor presenta el primer argumento a partir de la ejemplificación de lo sucedido con la crisis de 2008, en la cual se pudo evidenciar el rol fundamental que jugó el Estado (USA) al resolver y apoyar la regulación del mercado. En este punto, Judt argumenta que al evitar la relevancia que tuvo este hecho y sobre todo, al no recapacitar sobre lo sucedido, se prevé crisis similares en un  futuro cercano.

En el segundo argumento, se expone la importancia que tuvieron los debates entre las corrientes ideológicas de izquierda y derecha en la década de los 70’s que aunque se encontraban enfrascados en disputas sobre la preponderancia entre el capitalismo y el socialismo, dichos debates en sí mismos, resultaban útiles al ejercicio de repensar el papel del Estado en la regulación del mercado. Para Judt, el actual debate entre izquierda y derecha carece de fundamentos en los qué apoyarse.

En línea con esta idea, el tercer argumento apunta al papel que desempeñan los jóvenes y estudiantes en las condiciones actuales, las cuales se fundamentan en un panorama de desorientación y frustración generalizada. Al respecto, el autor replantea ésta visión y expone que las preocupaciones de los jóvenes deben ser reencausadas a través, nuevamente, de la necesidad de repensar las discusiones y los planteamientos ésta vez de manera profunda. “Nosotros sabemos que algo está mal y hay muchas cosas que no nos gustan. ¿Pero en qué podemos creer? ¿Qué debemos hacer? (…) En cualquier caso, hay que poder designar el problema que se quiere resolver.” (Judt, Pág. 19).

El cuarto argumento se plantea en torno a la definición de los conceptos liberal y socialdemocracia que a su vez se enmarcan en las diferencias percibidas en ambos lados del Atlántico: Norteamérica y Europa. Para el caso de Norteamérica, el autor expone que “Los socialdemócratas propugnan la tributación progresiva a fin de financiar  los servicios públicos y otros bienes sociales que los individuos no pueden adquirir por sí solos”, (Judt, Pág. 20) sin embargo, este hecho no es del todo aceptado y bien valorado en este país ya que supone mayor preponderancia para el Estado y el sector público, y esto es algo con lo que no están de acuerdo algunos sectores que promulgan priorizar al sector privado. El caso en Europa, en términos del autor, es distinto ya que allá el Estado de bienestar no ha perdido popularidad entre los beneficiarios, pero ha resultado difícil defender a la socialdemocracia ya que está tomando fuerza esa crítica constante a que dicho Estado de bienestar es demasiado caro o ineficiente desde el punto de vista económico. El autor concluye esta divergencia afirmado que el problema no se debe desarrollar en torno al qué hacer, sino cómo repensarlo para abordarlo de una manera menos simplista y más profunda.

Para presentar el último argumento, el autor parte de la ejemplificación de lo que significó el ‘Consenso de Washington’ en los primeros años del siglo XXI para retomar  nuevamente su tesis central sobre la necesidad de repensar el papel del Estado en la regulación de los mercados, ya que dicho consensó significó el derrumbamiento del sistema bancario, y fue gracias a la intervención del Estado que se logró recuperar la estabilidad económica. “Los principales beneficiarios han sido esos mismos partidos de centroderecha que antes ponían tanto empeño en emular a Washington. La conclusión de este argumento, apoya nuevamente la tesis del autor, en tanto de manera expresa afirma: “La necesidad práctica de Estados fuertes y gobiernos intervencionistas está fuera de discusión, pero sigue habiendo una marcada renuencia a defender el sector público  en nombre del interés colectivo o por principio”. (Judt, Pág. 23)

...