Festividades Del Pueblo De Ixtacalco

FESTIVIDADES DEL PUEBLO DE IXTACALCO

JUBILEO DE OCTUBRE

“Es una fiesta para honrar a Jesús Vivo Sacramentado, en la que todos nos hermanamos nos unimos para servirle al Señor a través de nuestro trabajo y esfuerzo, logrando una unidad espiritual”, explicó el señor Juan Manuel Chaparro, mayordomo de la Sociedad de San Matías.

Esta gran festividad es el jubileo de 72 horas que se inicia el 19 de agosto con la colocación de las pozas, que son pabellones en los que las asociaciones y los barrios colocan las imágenes patronales.

El día anterior al inicio del jubileo prácticamente se construyen las pozas, en la actualidad se cuenta ya con estructuras fijas que son cubiertas con lonas en el exterior, como dijimos el interior es ricamente adornado con cortinajes y pasamanería, arreglos florales y ceras, en la tarde o noche se coloca la portada que según la preferencia del mayordomo será el material (semillas, flores, frutas, verduras, juguetes, dulces, etc.) en el interior se coloca la imagen a quien es dedicada.

Todos los días es una fiesta camaradería ya que si es requerido, se ayudan entre todos para la puesta de las posas. Las mayoras y topílas de las asociaciones y barrios preparan comida, desayuno y cena los días que dura el jubileo y en cordial camaradería comparten loa alimentos.

OCTUBRE

El 1° de octubre da inicio un septeario de la virgen del Rosario a las 5 de la mañana.

4 de octubre se celebra a San Francisco de Asis con solemne Misa.

NOVIEMBRE

Aunque el 31 de octubre colocamos las ofrendas pues la creencia es que a las 8 de la noche de este día llegan los fallecidos en accidente o que murieron ahogados, celebramos el 1° los fieles difuntos (muertos chiquitos), el 2 todos los santos. Desde 2006 se viene celebrando en el panteón de Sn José con el auspicio de la delegación Iztacalco una manifestación de ofrendas, cada barrio se le asigna un espacio fuera del panteón para que ponga alguna ofrenda y a las 8 de la noche se celebra una misa en recuerdo a los difuntos.

En nuestras casas hacemos una ofrenda personal, antiguamente solo se le colocaba agua, sal y veladoras, se hacía una oración y se esperaba que pasaran los “campaneros” personas que sonando las campanas y con faroles venian acompañados de niños y adultos, venian a las casas ofreciendo una oración colectiva, a lo que los del hogar obsequiaban con dulce de calabaza o tamales.

Hoy en día solo algunos recuerdan a los Campaneros y optan por el Hallowin o pedir calaverita.

El primer domingo de noviembre es la costumbre de los de Iztacalco acudir a la casa de los mayordomos de las Virgenes de Guadalupe (la grande, la chica y la cerera) a dejar la limosna para la ida a la Villa de Guadalupe, es algo simbolico ya que por su limosna de aproximadamente $30.00 ó mas se obsequia mole, pollo, frijoles, tortillas y pulque, la tradición es traer la casata con sus ollas y cazuelas de barro cubierta con su servilleta bordada, aunque si trae sus topers se les dá la vianda, pero se vé feo. Todo esto es para que no haya pretexto de no ir a la peregrinación a la Basílica.

Primer Lunes de noviembre

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