GLOBALIZACION

Horst Köhler comienza por darnos un concepto de globalización:

“Proceso de creciente división internacional del trabajo y la consiguiente integración de las economías nacionales a través del comercio de bienes y servicios, la inversión externa de empresas y los flujos financieros. El progreso técnico, sobre todo, en el ámbito de los transportes y las comunicaciones favorece este proceso. En su forma ideal, la globalización es un juego de suma positiva, en el que todas las economías se benefician, en última instancia, a través de los efectos combinados de la mejora de la productividad y el crecimiento. No obstante, significa también que esas economías enfrentan una mayor competencia internacional, lo que exige un cambio y adaptación constantes. Y no se trata simplemente de algo que se nos imponga, sino que es también consecuencia de las fuerzas del cambio que tan arraigadas se encuentran en la naturaleza humana: la búsqueda de la libertad y de una vida mejor, de nuevos descubrimientos y de horizontes más amplios.”

Así pues, nos menciona que la globalización trasciende al ámbito de la economía.

Echando mano de la historia; nos habla de que la globalización no es un fenómeno reciente. Sin embargo, esta tuvo un impulso universal en la segunda mitad del siglo XIX con la utilización de la electricidad, la invención de la máquina de vapor, la ampliación de la red de ferrocarriles y la creación del patrón oro.

Horst Köhler alude a algunos beneficios que ha traído consigo la globalización, tales como el crecimiento económico; sin embargo, también nos presenta riesgos como la persistencia de la pobreza y la repetición de las crisis financieras.

Lo cual ha dado lugar, a un debate crítico.

Horst Köhler cita a Justus Möser, refiriéndose a la desconfianza que sentía por la posibilidad de que una economía de libre mercado destruyera puestos de trabajo e hiciera desaparecer la identidad cultural; lo cual a mi parecer es una de las mayores amenazas de este proceso económico.

Nos explica que para él, la globalización no es ni buena ni mala; todo depende de cómo se maneje, es decir, de la medida en que podamos aprovechar las oportunidades que ofrece y, al mismo tiempo, limitar sus riesgos.

...