Homosexualidad En Las Olimpadas

El mes pasado en Sochi se celebraron los juegos olímpicos de invierno con la participación de varios países y deportes pensando que sería un evento deportivo “justo y de convivencia” se presentaron varios hechos que dieron a entender lo contrario, empezando en un contexto de medidas represivas a la diversidad afectivo-sexual por parte del régimen de Vladimir Putin, teniendo a la policía muy alerta durante todo el evento de ninguna manifestación homosexual , con la contundente votación anterior que prohíbe a los homosexuales manifestarse con 434 votos a favor uno en contra y una abstención; siguiendo la filosofía rusa “proteger a los menores de las consecuencias de la homosexualidad”. Siendo claro el descontento de varios deportistas con la ley, el abanderado del equipo español y campeón de Europa de patinaje, Javier Fernández, preguntado en una entrevista sobre las leyes “antigays” del Kremlin, afirmaba textualmente que “los Juegos son deporte y no política” con lo cual concuerdo al cien por ciento, los juegos olímpicos deben ser con fines deportivos para crecer como deportistas y como personas, teniendo una sana competencia entre todos los países, no para reprimir a los competidores de una manera en la cual no tiene nada que ver con el deporte. Más allá de las declaraciones desafortunadas lo que se pone sobre la mesa es un debate que viene de lejos y que está presente en todo el mundo. El debate de la visibilidad de las personas lesbianas, gays, transexuales y bisexuales.

Este debate es el que se esconde detrás de las opiniones contrarias por la celebración del Orgullo LGTB aludiendo que no se celebra un Orgullo Heterosexual; o el que reprueba que ciertas personas se identifiquen públicamente como lesbianas, gays, transexuales o bisexuales, en vez de guardarlo en su intimidad. El candidato de UPyD llegó a calificar esta visibilidad de “vergonzosa y oportunista”.

La visibilidad es nuestra mejor arma, como sociedad, para defendernos de visiones uniformizadoras y opresoras. Vergonzoso, creo, sería tener a mano una gran arma contra la homofobia y no hacer uso de ella. Que nos vean como personas gays, lesbianas, transexuales o bisexuales, visualiza una sociedad plural, diversa y donde la orientación sexual no tiene porqué ser un límite para ser diputado, médico o deportista. Con esto lo único que refleja es la real homofobia o del pueblo o del presidente Bladimir Putin y así violando los derechos de libre expresión de cada ser humano.

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