LA EDUCACIÓN EN LA CONSTITUCIÓN

LA EDUCACIÓN EN LA CONSTITUCIÓN

La educación siempre desde siempre ha tratado de ser la clave para crear un país mejor que caracterice en aspectos positivos al país, esto sería posible con la debida formación de la sociedad siendo capaz de crear a ciudadanos productivos y aptos para optimizar el país, pero no siempre las normativas del país estaban acordes de las necesidades de cada individuo, puesto que la educación siempre ha sido víctima de las acciones de las acciones privatizadoras de gobiernos sometidos a dictados internacionales, pero actualmente en la constitución del ecuador, en el artículo 26 se plantea que la educación es un derecho de las personas a lo largo de su vida y un deber ineludible e inexcusable del estado. Constituye un área prioritaria de la política pública, todo esto fue posible luego a partir de la conciencia trasmitir ideales que sean capaces de mejorar la calidad de la educación sosteniendo primordialmente los tres conceptos básicos que son el buen vivir, los derechos humanos y los principios de la pedagogía latinoamericana.

El camino hacia la libertad es la educación, que sea capaz de llevar al desarrollo con base a conocimientos y que potencialice la identidad de los ciudadanos, este concepto de educación es tan aceptado en la actualidad que su historia no ha sido promulgada para saber lo que tuvo que suceder para que se haya llegado a ser tan importante en el desarrollo de la ciudadanía, los obstáculos que tuvo que superar para el acondicionamiento correcto tanto en educación laica y liberal como lo desarrolló Eloy Alfaro, quien creo un colegio donde supero la educación pluriclasista en donde se abarco la segregación de las diferentes clases sociales que separo la educación-economía creando una educación inclusiva.

El gobierno de la Revolución Ciudadana propone mejorar el país formulando propuestas innovadoras para los cambios que la sociedad ecuatoriana tiene en perspectiva, y para ello, necesariamente, debió elaborar reformas educativas que la sociedad admite como legítimas, pero que no comparte en cuanto a los medios que se están ejecutando para lograr. Lo más transcendental de la nueva Constitución es el amplio tratamiento que da a los derechos humanos y al establecimiento de diversos mecanismos dirigidos a salvaguardar su ejercicio teniendo en cuenta que el Estado es responsable de la definición y ejecución de las políticas que permitan alcanzar los objetivos indicados tanto en la educación pública como en la privada, en donde se respeten los principios éticos, pluralistas, humanistas y democráticos.

La educación en todos los niveles, modalidades y sistemas debe promover el respeto a los derechos humanos, fomentar el civismo, desarrollar un pensamiento crítico; proporcionar destrezas para la eficiencia en el trabajo y la producción; estimular la creatividad y el pleno desarrollo de la

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