LA INFLUENCIA DEL CONSUMISMO EN PERSONAS DE MÁS BAJOS RECURSOS

LA INFLUENCIA DEL CONSUMISMO EN PERSONAS DE MÁS BAJOS RECURSOS

A lo largo de los años, la sociedad ha tenido diferentes transformaciones sociales, políticas, económicas, ideológicas, entre otras, cada una de ellas con un sentido de querer evolucionar y cambiar ciertos aspectos que se tenían antiguamente. Entre ellas se encuentra su economía, el cual es uno de los mayores cambios respecto a cómo la sociedad relacionaba sus bienes, sus productos, sus propiedades, etc. Gracias a esta nueva transformación, la sociedad pasó de tener una economía ambigua, en donde la compraventa se hacía por intercambio sin la necesidad de utilizar el dinero, a una más moderna, con un nuevo sistema económico llamado el Capitalismo. El cual generó como consecuencia general, la dependencia del capital, ya que, sin este, las necesidades básicas no se podrían suplir y la supervivencia sería completamente nula.

Ahora bien, si una persona tiene suficiente capital, no tiene obligaciones que cubrir, vive en total armonía sin ninguna preocupación por conseguir ese dinero, tratará de invertir de alguna u otra manera el valor de la plusvalía en el consumo. El consumo es una de las problemáticas más grandes que durante los últimos años ha azotado a la sociedad, si bien se puede invertir en lo que se requiere, este mecanismo nos hace seguir y seguir gastando aun cuando ya se tenga todo lo preciso para vivir, esto en razón a que de alguna u otra forma se tienen que seguir produciendo propiedades para que la economía se estabilice. A este fenómeno se le conoce como el consumismo, el cual es la tendencia de gastar en bienes o servicios de una manera descomunal sin tener la necesidad de obtenerlos, esto a gran escala se podría decir que se está invirtiendo en productos no esenciales para la subsistencia de la sociedad. Gracias a esta problemática, el consumismo afecta más a las personas de bajos recursos gracias a la ausencia que genera en ellos no tener cierta propiedad extra a las que se necesita para sobrevivir, por consecuencia de que la fuerza de trabajo sigue siendo un tipo de esclavitud que obliga a los pobres a trabajar para obtener un bien o un servicio. Es por esta razón, que en este ensayo se hablará acerca del impacto que tiene este en la sociedad, tomando como referencia la crítica que Karl Marx nos ofrece acerca del capitalismo en muchos de sus manifiestos, para luego contestar a la siguiente pregunta: ¿Cuál es la influencia que genera el consumismo en las personas de más bajos recursos? 

 Para contextualizar al autor de estos manifiestos, se dice que Karl Marx fue un filósofo, economista, sociólogo alemán del siglo XIX, cuyo pensamiento revolucionario se basaba en la desigualdad de las clases sociales, es decir, se interesaba por descubrir el inicio y el porqué de muchos problemas socioeconómicos que incluso hoy en día seguimos teniendo (pobreza), a pesar de que ya pasaron casi 150 años desde que Marx impuso su pensamiento, lamentablemente la sociedad se sigue formando con una brecha muy grande entre desigualdad y el capital.

En uno de sus manifiestos más reconocidos del siglo XIX (El capital), Marx nos habla propiamente de la revolución industrial como fase inicial del capitalismo, en donde la clase social más alta llamada burguesía toma su poder de mandato hacia las clases sociales más bajas, es decir, a los pobres propiamente. Según Marx (1867) “la burguesía es una clase social del régimen capitalista, en la que sus miembros son responsables de la producción, son dueños de su propio negocio y son el opuesto de la clase obrera”. Por defecto, esta clase social está encargada de producir con su fuerza de trabajo lo que llamamos bienes o productos de la economía, que finalmente todo se reduce a un valor de capital. Marx además nos adentra a un término llamado “enajenado”, que se puede traducir como la relación del trabajador y el trabajo que se produce, valga la redundancia. Aquello se vuelve impropio o fuera de la alcance de él una vez el empresario pueda obtener todo el capital de esa mercancía, y se adueñe de lo que se conoce como la producción que propiamente hizo el obrero. Para contrastar este problema social, político y económico, Marx nos plantea una sociedad ideal, “La sociedad ideal es el comunismo, en donde el hombre vive en el reino de la libertad, y que constituye única posibilidad de que el propio hombre puede ser omnilateral, es decir, desarrollado en todos sus sentidos” (1848). Con esto, nos garantiza un nuevo modelo económico libre de clases sociales y sin un trabajo enajenado que con el tiempo se vuelve propiedad privada.

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