LA ISLA DE LAS FLORES

LA ISLA DE LAS FLORES

“La isla de las flores” es un corto documental filmado en 1989 y dirigido por Jorge Furtado. Dentro de este film podemos observar, de una forma satírica, la realidad que ocurrió en la isla de las flores ubicada en Brasil; donde las personas tenían que comer los desperdicios que dejaban no solo las personas si no los cerdos, para el dueño del botadero era más importante alimentar a sus animales y luego darle un mínimo de tiempo a las personas para que ingresaran y pudieran recoger algo que pudieran comer de lo poco que dejaban los animales. En el documental se ponen en evidencia muchas de las falencias por las que pasaban dentro del sistema organizacional.

Desde mi punto de vista me parece injusto que las personas de escasos recursos tengan que resignarse a alimentarse de los desechos de la gente y de los cerdos por la mala distribución de los recursos y la falta de oportunidades para poder conseguir un empleo con el cual podrían subsistir de una mejor manera, es aquí donde me pregunto dónde quedaron los derechos humanos, el derecho a la igualdad.

Cabe resaltar que en este video el director no busca hablar sobre el capitalismo sino sobre las condiciones humanas vividas por estos isleños.

El capitalismo es un concepto histórico que aunque sus bases son el egoísmo, al compararlo con las condiciones poco humanas en las que viven estas personas es evidente que no es el capitalismo el problema, el problema radica en los seres humanos, puesto que, si fuéramos más correctos nuestras ideologías y pensamientos serian igual.

Debemos ser conscientes que esta problemática no solo sucedió en Brasil, en la actualidad, la mayoría de países subdesarrollados y en vía de desarrollo afrontan esta problemática, donde las elites manejan a su parecer los usufructos de la sociedad, llegando a tal punto que la economía de esta sociedad llega a una crisis socio-económica.

Para concluir deseo dejar una reflexión: que aunque una problemática no pase en nuestro país, ciudad o barrio, no quiere decir que no nos afectara.

Por: Holman E. Salgado B.

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