LA SOBERANÍA Y LA FORMACIÓN DEL ESTADO

LA SOBERANÍA Y LA FORMACIÓN DEL ESTADO

Desde que comencé la lectura en varios momentos pensé en la Organización de las Naciones Unidas, a partir de tomar esta institución como un ejemplo para tratar de entender la teoría del texto, también surgieron varias preguntas.

Para comenzar, ¿podemos decir que la Organización de las Naciones Unidas es una instancia supranacional o sólo una institución? Por la crisis humanitaria y económica que dejó la Segunda Guerra Mundial, 51 países crean la Organización de las Naciones Unidas en 1945 con finalidad de mantener la paz y la seguridad de los estados miembros. La ONU tiene distintos organismos como UNICEF, UNWOMEN, ECOSOC, entre otros; actualmente son muy pocos los países que no son reconocidos por la ONU, y sigue siendo una minoría los países que a pesar de ser reconocidos como Estados, no forman parte de los demás organismos y fungen como observadores sin derecho a voto. Para que una nación pueda ser miembro el Consejo de Seguridad examina la solicitud, y debe recibir votos favorables de 9 de los 15 miembros del Consejo, siempre y cuando ninguno de los miembros permanentes, que son la República Popular China, Estados Unidos de América, República Francesa, la Federación de Rusia, y el Reino Unido de Gran Bretaña e Irlanda del Norte- hayan votado en contra de la solicitud. ¿No es esta una relación de poder? Aunque la ONU no sea un Estado como tal, establece a nivel internacional los papeles de trabajo que se deben de cumplir, pero, los miembros permanentes con potencias, son países avanzados que tienen mucha economía y tecnología comparado a los demás miembros no permanentes. Ellos deciden quienes entran a los organismos y a quienes reconocen como Estado.  

Otra pregunta que me surgió es, si la ONU no es una instancia supranacional, así como lo puede ser el Banco Mundial, la Unión Europea y la Organización del Tratado del Atlántico del Norte, ¿es entonces la instancia supranacional el principio en el que se rigen estas estructuras?

El autor del texto escribe algo que me genera ciertas inquietudes, lo cito a continuación:

 “La cuestión puede plantearse así: ¿hasta dónde llegan los derechos de los Estados y dónde empiezan los derechos de la comunidad internacional en un sentido genérico? Éste es un problema secular del que difícilmente podemos sustraernos; está en el corazón del problema del Estado moderno, pues la globalización como gran tendencia se basa en el reconocimiento fáctico de valores que todos los Estados deben compartir (democracia, derechos humanos, libre comercio) o la formación de intereses superiores (como la conservación del planeta), que deben ser tutelados por la comunidad internacional, quedando el Estado nacional sin probabilidad de resistirse”.

Me parece desagradablemente divertido el “deben ser tutelados por la comunidad internacional, quedando el Estado nacional sin probabilidad de resistirse” porque si miramos la situación internacional actual parece inexistente la tutela, ya que los miembros de la comunidad internacional han tomado sus propios intereses a partir de su propio Estado, es decir, se han separado por sus intereses personales (y algunos nacionales). Digo personales porque quienes se beneficiaran son la burocracia, ya que los valores fácticos que todos los Estados deben cumplir se reconocen con el fin de proteger y mantener la seguridad a la población, si no se cumple, no existe una seguridad o una calidad de vida deseable. Lo veo en Donald Trump diciendo que el calentamiento global no existe o el en el gobierno mexicano siendo tan indiferente en la integridad del pueblo mientras violan nuestros derechos humanos.

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