La Historia De Las Cosas

Historia de las cosas

Es evidente a través de nuestro comportamiento y daños que ahora están afectando nuestro planeta, que nos hemos vuelto una sociedad consumista, de tal manera que los grupos, culturas, economías se han cegado ante una crisis que poco a poco esta destruyendo el planeta.

La manera en que llevamos la economía de las cosas nos esta llevando al derroche de nuestros recursos naturales, de modo que estamos consumiendo los recursos finitos del planeta y nos estamos apropiando de los recursos de las generaciones futuras.

Uno de los puntos mas importantes de este sistema es la obtención del recurso para la adquisición de los productos que compramos, en el cual nosotros probablemente somos el eje del conflicto. Actualmente no hacemos uso razonable de los recursos, especialmente los grandes países que consumen la mayor parte de dichos recurso y que realmente tienen la noción del daño pero lamentablemente no es un tema importante para su provecho.

Posterior al deterioro del recurso, esta la fabricación del producto en donde la tecnología nos facilita la obtención de los mismos. Lo que las personas no vemos, es la manera en que son elaborados, es decir que se utilizan productos o químicos sintéticos que ciertamente nos provocan un mal. El consumismo provoca una obcecación ante lo que verdaderamente debería de ser de nuestro mayor interés. Las personas no consideramos el impacto que no solo causan en nosotros si no también en nuestro ambiente, que al final viene a repercutir en nosotros. Este daño se ve reflejado en el ambiente, a través de los cambios climáticos que estos han provocado en nuestro planeta, de las enfermedades que ocasionan los mismos. La trampa de estos productos es que son fabricados con una vida útil muy pobre, de tal manera que somos persuadidos a comprar nuevas y diferentes tecnologías. De esta manera se mide nuestro egoísmo hacia nuestro planeta, no solamente la explotación de recurso sino también el daño que provocamos con la gran cantidad de desechos que la mayoría son no degradables.

Finalmente las sociedades deberán hacer frente ante un conflicto que aparentemente es insignificante, pero a largo plazo nos esta afectando. Este cambio será colectivo únicamente brindándole la responsabilidad que amerita este tipo de crisis mundial y poniendo en práctica un sinfín de prácticas “amigables” con el ambiente.

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