La Mediación En El Ambito Familiar

- Dei, H., La tesis. Cómo orientarse en su elaboración. Buenos Aires, Prometeo, 2006.

El desenvolvimiento de los juicios y los razonamientos que proceden del intelecto son también fruto de la espontaneidad, de la existencia humana.

Nadie deja de conocer realidades del mundo y de si mismo, y nadie deja de tener juicios positivos o negativos sobre ellos.

EL desenvolvimiento del pensar y del juzgar es tan espontaneo como lo es ver, gustar, oír o tocar. El enlace de los juicios constituye una expresión de esta realidad vital de lo humano.

Si lo planteamos desde otra perspectiva, el hombre no podría no pensar, si el hombre pudiese suprimir sus actos de pensar, debería dejar de existir.

EL hombre está condenado a pensar, no puede dejar de pensar, no puede dejar de tener juicios.

Plantea esto porque el propósito primario de la primera parte de nuestro curso va a ser el comprender porque si el conocer humano es espontaneo ustedes tienen que cursar una materia como metodología de la investigación para aprender a conocer cómo hacer una tesis.

Lo primero que hay que enfocar es saber que es lo que tienen que llegar a realizar.

Conocer es experiencial y este conocimiento es espontaneo, fragmentario, esta acotado a lo que me sucede. Y además este conocimiento es circunstancial.

Es un conocimiento a-metódico, sin plan para conocer, no es un conocimiento programado, conozco como me suceden las cosas y por eso las conozco a- metódicamente y fragmentariamente.

En este sentido también vamos a señalar que este conocimiento s subjetivo

El conocimiento exige un sujeto que conozca, entonces si hay una tesis es porque hay un sujeto que ha realizado determinadas operaciones cognitivas cuyo producto es la tesis.

Como de una subjetividad puede hacerse ciencia, como desde una subjetividad se hace ciencia.

La tesis se trata de esto, como desde un área determinada, concreta y acotada del derecho puedo llegar a una tesis.

Juzgar y razonar, enlazar estas preposiciones, el hombre no podría no tener juicios sobre sí y sobre lo extrínseco a sí.

Este conocer es también fragmentario, porque según hemos advertido ayer al reflexionar sobre este modo de conocer el origen espontaneo de este conocimiento hace que sea circunstancial, es decir, es un conocimiento que sigue el compas de lo que me acontece en la vida, que es lo que está referido a las circunstancias de lo que ocurre, de lo que me acontece.

Yo conozco las cosas según lo que me sucede

Todos tenemos categorías desde las cuales conocemos. No podemos conocer desprendiéndonos desde las características propias. Cuando hablamos de la problemática de la subjetiva lo que estamos buscando señalar es precisamente esto, que el que conoce es un individuo humano subido en su singularidad.

Uno tiende a pensar las cosas

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