“La Tauromaquia En México”

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Miguel Ángel Hernández González

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28 de noviembre de 2018

Julio César Landero García

“La Tauromaquia En México”

Introducción al Derecho

        El tema de la tauromaquia es un tema muy delicado, ya que no cualquiera ve la fiesta brava como arte o tradición, es más, hay gente que no ve la tauromaquia como arte ni cultura, lo ven como tortura. En este ensayo voy a defender mi punto de vista del arte y cultura de la tauromaquia dando argumentos a favor de la fiesta brava e intentar contrarrestar los argumentos de las personas que no apoyan a la fiesta más bonita de todas.

Hay que considerar que las corridas de toros eran totalmente desconocidas en México hasta la conquista de los españoles. Todos sabemos que los españoles que nos españoles no solo trajeron armas, equipo agrícola, animales, etc., sino también sus usos y costumbres. El primer registro del toreo como espectáculo fue el 24 de junio de 1526, como celebración del aniversario de la toma de la ciudad de Tenochtitlán.

        Como ya se sabe, la tauromaquia es una profesión con mucho detalle y elegancia.

        Pero ¿Qué significan las corridas? ¿Por qué todo debe llevar cierto orden? Bueno, la corrida de toros comienza como el sacrificio de un toro bravo a un Dios o un santo, esto como una celebración para poder tener un buen año o una gran cosecha, el toro bravo es usado debido a su gran carácter de fiereza y bravura, además, como fue antes mencionado, el toro era de carácter divino para algunas civilizaciones en los años prehistóricos. Además, el significado de poner a un toro que por simple naturaleza es bravo contra un hombre es la representación de la vida y la muerte, es la viva representación en la que dos protagonistas luchan, ambos, por la vida por lo que para los taurinos el acto en una corrida de toros no pretende menospreciar a un animal y mucho menos se trata de matar al animal de forma sádica, sino que es un espectáculo el cual muestra la lucha entre la inteligencia de un ser humano y la fuerza de la naturaleza. Esto nos muestra que en si la corrida de toros no es solo un “asesinato” como muchos antitaurinos proclaman.

Pero, la realidad que no podemos negar es que conforme los años pasan el pensamiento de las personas va cambiando por lo que hoy en día hay cosas que no son aprobadas según la ética de ciertas personas, este podría ser tomado como cualquier otro tema en el que cada persona tan solo toma parte de un lado según sus preferencias, aunque debido a el actual levantamiento en contra de el toreo las autoridades se comienzan a preguntar si este acto, conforme el pensamiento actual, puede ser considerado maltrato animal e incluso asesinato por lo que debería ser prohibido. Hoy en día, debido a las actuales polémicas existen varios países y ciudades que han prohibido estas corridas, algo que no pasaba desde 1567 cuando el Papa Pio V las prohibió. Tan solo en España, el lugar originario de la tauromaquia e incluso el país con más afición a esta tradición, se ha prohibido el toreo en más de 80 municipios y provincias como Austrias, Andalucía, Canarias y por último Cataluña. De hecho, hoy en día hay solo 8 países donde la tauromaquia es legal. Estos incluyen :

        Una faena completa está dividida por tercios y por distintas suertes. En seguida voy a desarrollar detalladamente cada una. [pic 3]

        Primero, la suerte del capote. El capotazo comienza con la etapa de citar al toro. El objeto es fijar la vista del toro obligándole a tomar el engaño. La atención la logra el torero mediante la propia voz o con el movimiento del engaño, provocando la embestida.

Una vez iniciado el arranque, el diestro carga la suerte, retirando el cuerpo de la trayectoria del toro para evitar el embroque y facilitándole la salida. “Cargar la suerte” consiste en adelantar el engaño hacia el toro, y mediante un ligero juego de cintura y echando la pierna hacia adelante, se facilita que el toro siga el camino señalado por el engaño, permitiendo su salida del lance sin atropellar al torero.

El torero termina el lance con el remate. Retira el engaño y prepara al toro para el lance siguiente. La etapa de remate es crítica para lograr el lucimiento; el diestro debe realizarla con seguridad y dominio de la situación; pero sin olvidarse del adorno y el desplante realizado con elegancia y gallardía. El remate con desplante será valorado y se ejecuta cerca del toro en terreno de riesgo.

Muy importante a la hora de valorar el arte del capotazo, es el temple. Se denomina temple, al ajuste de la velocidad del engaño. El torero aplica la velocidad adecuada al engaño, y poco a poco intentará ir reduciendo la velocidad de la embestida hasta lograr torear despacio, como si fuera a cámara lenta. La reducción de velocidad será consecuencia del acierto del diestro o del cansancio y “voluntad” del toro.

Comúnmente se le llama “tercio de quites”. Un “Quite” es literalmente la acción de apartarse al toro del lugar donde puede ser cogido. Existen más de 200 diferentes quites, pero los más conocidos, o bien, los quites principales son las “VERÓNICAS”, “CHICHUELINAS”, “GAONERAS”, “REVOLERA”, “TAFALLERA” y “PORTA PAYOLA”. La “verónica se realiza sujetando el capote con las dos manos, el torero adelanta el capote para citar al toro y al paso de éste carga la suerte hacia la derecha o la izquierda, intentando adelantar una pierna para así preparar la siguiente pierna. Pero ¿Por qué se le llama “Verónica”? La mujer que le limpió el rostro a Cristo mientras el cargaba la cruz que se dirigía al calvario. Verónica. El quite “La Verónica” es una representación de ese momento, enseñándole y templando la tela al hocico del toro.

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