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¿La Tauromaquia es una expresión cultural?


Enviado por   •  27 de Marzo de 2022  •  Ensayo  •  1.752 Palabras (8 Páginas)  •  101 Visitas

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¿La Tauromaquia es una expresión cultural?

Milagros Panduro Martín Los toros son seres vivientes con un sistema nervioso central, por lo que sienten

dolor y sufren como cualquier otro ser viviente que tiene un sistema central. El toro sufre al ser incitado para abordar el camión, siente miedo, pánico en el recorrido del trayecto. El bullicio, la ausencia de visibilidad, las arengas del público no son conocidos para el toro y lo toma como algo peligroso. El hecho de que sea una tradición no quita que sea injusto y cause sufrimiento. Hay varios ejemplos: (a) la esclavitud, (b) racismo y (c) el sexismo que fueron parte de nuestra cultura y tradición pero que se han retirado de nuestra cultura y actualmente ya no las compartimos como tal. Sin embargo, algunos países todavía siguen practicándolo como arte, cultura o tradición. Por eso, en este ensayo, defenderé que la Tauromaquia es un acto de crueldad, mas no un arte de la sociedad y debe eliminarse.

Sin embargo, para Llosa (2010), es difícil negar que la Tauromaquia se considere como un festejo sangriento y cruel, pero, en la misma línea, no se toman en cuenta las diferentes y muchísimas actividades y acciones de las personas con los animales como por ejemplo usar las plumas o pieles para zapatos, carteras, abrigos; comer camarones y otras carnes de animales a los que matamos para alimentarnos. Es una falsedad sólo ver el caso de los toros cuando hay tantos otros casos de sufrimiento de los animales a causa del bienestar de las personas y realmente las personas que dicen defender o estar en contra de las corridas de toro por su sufrimiento, son personas que no tienen amor por los animales, porque muchas veces, sólo es una actitud política y falsa de amor hacia los animales en general.

La Tauromaquia es una actividad que genera mucha controversia y debate en torno a la ética y valores actuales, ya que muchos la consideran como un arte a las

corridas de toros, pero la percepción de arte es una concepción muy abierta y subjetiva que es difícil llegar a un acuerdo o punto medio. El debate sobre la oposición a las corridas de toros viene desde la edad media, donde ya era prohibido por los religiosos mediante varias regulaciones y eran considerados como profanos. Posteriormente las prohibiciones en la sociedad civil se dio inicio en España en el siglo XIX, pero no tenían mucho éxito ya que en ese momento las corridas de toros se celebraban con mucha frecuencia y eran parte de las celebraciones locales. Las corridas de toros en los últimos tiempos han tomado mayor interés por parte de las sociedades en las cuales está “tradición” como algunos la llaman se ha venido practicando, independientemente de si la muerte del animal se da dentro del espectáculo o fuera de él, ya que de cualquier forma la muerte del toro se da, y en las más indignas y crueles condiciones; este interés ha sido de dos tipos: uno, de aquellas personas “incivilizadas” que disfrutan de la tauromaquia y el sufrimiento que esto implica para el animal, y por otro lado grupos de personas que buscan una relación más sincera y armoniosa con los animales y la naturaleza. En la actualidad, el hombre ha sido el centro de los sistemas de valores, y por eso se pueden defender derechos más de los humanos que de los animales, en este caso del toro y por tanto no tendría el mismo nivel de derechos, sino, estarían por debajo de los derechos de los hombres. Para Giner (2002), la Tauromaquia simboliza todo un mundo complejo de costumbres y también se contradice con el pensamiento de la sociedad actual respecto con las tendencias de protección animal.

Para Wolff (2004) “el toro de lidia (bos taurus ibericus) no es para nada un apacible rumiante. Es una muy especial variedad de bovino, lejano descendiente del uro, que vivió más o menos en estado salvaje hasta el siglo XVIII y que estaba dotado de un instinto de defensa de su territorio muy desarrollado, una forma de “fiereza”. El auge de las corridas de toros permitió la creación de grandes ganaderías en las que los toros eran

y son criados en condiciones de libertad para preservar esa acometividad natural, a la cual se le añadió un proceso selectivo en función de la aptitud de cada ejemplar para la lidia. Estas dos condiciones, la natural y la humana, crearon un animal original, una especie de atleta del ruedo, dotado de bravura, es decir, de una capacidad ofensiva para el ataque sistemático contra todo lo que pueda presentarse como una amenaza, y muy especialmente la intromisión en su territorio. Por eso no sorprende que algunos estudios hayan demostrado que este animal, particularmente adaptado para la lidia, tenga reacciones hormonales únicas en el mundo animal ante el “dolor” (que le permiten anestesiarlo casi en el mismo momento en que se produce)”. Por lo anterior, se puede inferir que, incluso, entre los defensores del toreo se defienden argumentos “científicos” y “ecológicos” que plantean que la “crueldad” de la que hablan los detractores del toreo no es tal, sino que hace parte de la etología del animal, que no sentiría dolor sino placer, o por lo menos, realizaría una actividad propia de su instinto.

Según Villegas (2017), en España, pese a las oposiciones, se ha acudido al derecho de minoría y a la legislación para trasladar a un tema de patrimonio cultural inmaterial. En Bogotá, Colombia, el año 2012 se suspendió las corridas de toros en el ruedo de la plaza de toros. Ese día se terminó la tradicional temporada taurina y la plaza fue cerrada, indefinidamente, por decisión de su alcalde, convirtiéndose en el primer alcalde de su país en prohibirlo. En efecto, los toros son cruelmente matados al final de la corrida a corta edad de vida, 4 o 5 años. La actividad de Tauromaquia es lucrativa con el sufrimiento y vida de los toros. Muchos países ya no lo practican, sólo ocho a nivel mundial. La Tauromaquia merma la condición de humanos de las personas, ya que no muestra compasión por la vida de estos seres vivos. Por esta y las siguientes razones que se citan a continuación, la tauromaquia debe ser prohibida como práctica cultural:

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