La historia de las cosas, el sistema de mercancías forjado a través del tiempo conocido como economía de los materiales

Dentro de este documental, Annie Leonard  describe los procesos de origen y transformación de la materia de una forma gráfica, fácil de comprender. Hace alusión de manera indirecta al capitalismo, que es el fin total de este sistema, que según sus investigaciones, no funciona en nuestro mundo.

El tema central del documental, es mostrar el sistema de mercancías forjado a través del tiempo conocido como economía de los materiales, el cual establece que las cosas/productos se mueven por medio de un modelo, que va desde la extracción, es decir la explotación de recursos que finalmente terminan talando el planeta en una velocidad increíble, agotando su velocidad para vivir en él;  la producción, dentro de la cual es usada la energía para mezclar los recursos naturales con químicos tóxicos para fabricar productos contaminados; a la distribución, que se refiere a transferir los productos al mercado a muy bajo costo para que las personas los sigan consumiendo, mediante la externalización de costos reales de producción; al consumo, que significa la compra y el uso temporal de los productos y a la disposición.

Sin embargo, la autora describe que dicho sistema lineal se encuentra sumergido en una crisis, debido a que los seres humanos vivimos en un planeta finito. Para explicarlo de una forma más sencilla de comprender, hace uso de un diagrama que contiene todas las fases necesarias para que funcione de manera “correcta” este modelo. No obstante, dicho diagrama está sorpresivamente incompleto, está lleno de huecos sin resolver. Una de las cosas que más le hacen falta son las personas, quienes se encargan de pagar con su futuro, su educación, su tiempo,  el seguimiento del sistema.

Tristemente, el problema no acaba ahí, ya que además de encontrarnos rodeados de productos basura que posiblemente serán desechados en menos de seis meses, las televisoras (manejadas en su mayoría por el gobierno) se encargan de recordarnos que “si no tienes o compras mucho, no vales” encerrando a los seres humanos en un ciclo de desmotivación al ver los anuncios publicitarios y sentirse miserables, compra para poder contribuir a la flecha localizada entre la producción y el consumo y finalmente trabajar para pagar las deudas acumuladas.

Dicha técnica empleada por el gobierno, se divide en dos tipos:

•Obsolescencia programada: Diseñado para ser desechado, se diseñan cosas para ser inútiles, desechadas y adquirir nuevas.

•Obsolescencia percibida: Sirve para convencernos de tirar cosas que aún son perfectamente útiles. Lo hacen cambiando la apariencia de los objetos, haciendo más notorio a la vista el hecho de que no hemos contribuido a la flecha.

Afortunadamente, no todo está perdido, pues al ser un problema de amplio alcance, existen diferentes ámbitos dentro de los cuales es necesario comenzar a trabajar. Las cosas comenzarán a cambiar cuando veamos las conexiones, cuando veamos el cuadro completo que engloba el sistema. Personalmente, creo que si es posible el cambio, si todos están a favor del mismo, pues después de todo, el viejo camino fue introducido por personas como nosotros.

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