Ley Federal De Educación Mexicana

Ley Federal de Educación

Ley Nacional de Educación

Alumnos del Profesorado del C. J. J. Castro

Introducción:

En este trabajo se analizaran la ley núm. 24.195 federal de educación promulgada en abril de 1993; y la ley de educación nacional núm. 26.606, aprobada por el congreso en diciembre de 2006.

En marco de la primer y segunda reforma las cuales han generado cambios en las relaciones entre estado-sociedad y educación y su impacto en la educación pública.

Reformas del estado primera generación:

Las reformas del Estado de primera generación tuvieron como objetivo central achicar el rol del Estado, desmantelarlo y desmontarlo, ya que este desarrollaba funciones y actividades que en el nuevo contexto ideológico político-económico, neoliberal, se consideraban ilegítimas, y a su vez lograr una transferencia a otros actores e instancias jurisdiccionales.

Reformas del estado de segunda generación:

A partir de la segunda mitad de la década del ’90 el Banco Mundial centró su preocupación en la reconstrucción del Estado. Se trataría ahora de

Fortalecer al Estado y tornar más eficiente el aparato estatal existente. Un Estado que reordene funciones, responsabilidades y competencias.

La privatización, la descentralización, la desregulación

y la tercerización de servicios redujeron el aparato estatal, pero expandieron al mismo tiempo la

responsabilidad del mercado.

Consideraciones respecto a la primera reforma:

¿Por qué hablamos de transformación educativa en los ’90?

Porque este proceso, comandado por el Banco Mundial, generó un cambio, que desarticuló el modelo tradicional de educación pública, basada en la función del

Estado de organizar, crear, sostener, dirigir, extender, perfeccionar y supervisar el sistema educativo argentino en todos sus niveles y modalidades para asegurar el derecho a una educación igual para todos.

La Ley Federal Educacional redefinió la función del Estado en educación. Concretó y plasmó un viejo anhelo de los sectores más conservadores de nuestra sociedad, la de otorgarle al Estado una función subsidiaria, tornándolo irresponsable.

. La re significación de la educación pública que incluye ahora, tanto la gestión estatal como la gestión privada no sólo diluye las fronteras entre un espacio y otro, sino que incorpora la educación pública en el ámbito de intercambio de bienes privados, en el ámbito del mercado.

Sin embargo, en este proceso de desresponsabilización del Estado al mismo le cabe una función fundamental e indelegable la de evaluar, la de ejercer el control.

Con respecto a la segunda generación

¿Por qué la Ley Nacional de Educación es la Reforma de la Transformación?

Porque la Ley Nacional de Educación responde a la llamada segunda generación de reformas del Estado, también impulsadas por los Organismos Internacionales y como continuidad de la primera generación de reformas.

En necesario mencionar algunas similitudes con el proceso de sanción de la Ley Federal de Educación:

•En aquel momento ni ahora tampoco se partió de un diagnóstico riguroso y serio de los problemas educativos que tenían las distintas jurisdicciones.

•Los procesos de consultas en ambos casos, no han sido más que un simulacro de participación que apuntan a generar un falso consenso y a dar legitimidad a decisiones concertados en otros ámbitos y con otros sectores de la sociedad (empresarios, banqueros, iglesia). Para otros sectores de la sociedad, incluidos los docentes, no se generaron condiciones objetivas mínimas para poder incidir efectivamente en la toma de decisiones.

•Los intelectuales que plasmaron la transformación educativa en los ’90 son los

mismos que hoy plantean su reforma.

•De la misma manera que la Ley Federal Educación respondió a los lineamientos del BM, la Ley actual reproduce lo mismo.

Ley Nacional de Educación y segunda reforma del Estado

A partir de la segunda mitad de la década del ’90 el BM centró su preocupación en la reconstrucción

del Estado. “Muchos se preguntaron por qué se había vuelto necesario reconstruir aquello que el

propio Banco había recomendado reducir, años antes, a su mínima expresión. La respuesta es simple: porque le resultaba evidente que junto con el desmantelamiento estatal se había vaciado la escena pública y degradado el tejido social,

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