Los homosexuales en Rep. Dominicana

Introducción

Esta investigación trata de las consecuencias psicosociales de la homosexualidad en República Dominicana. Esta problemática resulta importante, debido al constante crecimiento que tiene cada día la comunidad de homosexuales y lesbianas. Son cada vez, más negocios de bares, discotecas, restaurantes y clubes que brindan servicios exclusivos a los homosexuales del país y los turistas gay que vienen de vacaciones.

La sociedad dominicana está interesada en preservar los valores morales y culturales, característico de esta nación; las instituciones como las iglesias (Evangélicas y Católica), las escuelas, los organismos que trabajan a favor de la familia, están preocupados por el desarrollo de esta variantes sexuales ya que traen como consecuencias enfermedades de transmisión sexual.

El objetivo general de esta investigación es analizar las consecuencias psicosociales de la conducta homosexual en los diferentes sectores de importancia, que son el soporte para el crecimiento, fortalecimiento y desarrollo de la educación, familia, ámbito laboral, religioso y cultural de la patria dominicana.

Este estudio ha sido delimitado a investigar las consecuencias psicosociales de la homosexualidad en República Dominicana, en el periodo de Junio – Agosto de 2005.

La Homosexualidad en la República Dominicana

Desde su fundación, en República Dominicana no existen leyes que sancionen la homosexualidad. Durante la España Boba en la parte occidental de la isla se aplicaba la constitución española de 1812 y el código penal que penalizaban la “sodomía”, situación que cambio a partir de la ocupación haitiana de 1822.

La percepción de rechazo ha variado favorablemente entre el 2006 al 2014. Según una encuesta de opinión pública emitida en enero de 2006 por la Fundación Global Democrática y desarrollo, el 57,7% de dominicanos rechazan la homosexuales. En 2012 y 2013, la encuestadora Newlink publicó que el 54% de los encuestados estaban en contra de que se adopten medidas de protección contra el maltrato y la discriminación de las personas homosexuales. En el 2013 la encuesta realizada por Newlink arrojó que el 55% de los dominicanos acepta cierto tipos de uniones homosexuales y que apena el 21.4% aprueba el matrimonio legal. En el 2014, la misma encuesta mostró que el 51,8% de los encuestados aceptaría una familia homosexual, mientras que el 62,2% lo haría si se tratase de un hijo.

Aspectos socio- demográficos

Se estima que los hombres homosexuales representan el 4.6% de la población dominicana. No hay estudios disponibles sobre a dimensión de la población de mujeres lesbianas.

Conformé a una encuesta realizada por el gobierno a 1,637 individuos de Santo Domingo y otras cuatro provincias se encontró que:

• Grupos etarios. El 45% de las personas GTH se encuentran por encima de los 25 años. Siendo los grupos de 15 a 24 años (en conjunto) la mayor cantidad.

• Niveles de escolaridad. En conjunto 97.8% reportó tener algún nivel de escolaridad. El 47.2% tiene un nivel preescolar/primario, el 46.21% posee un nivel secundario y solo el 6.59% alcanza un nivel universitario. En Santo Domingo se concentra la mayor cantidad de personas que alcanzaron el nivel universitario (14.1%).

• Fuentes de ingresos. Un 15.27% reportó estar asalariado y un 12.34% afirmó tener un negocio propio. Por lo que la tasa de desempleo en estos grupos se estima sobre el 70%. Un 20% reportó recibir soporte económico de la familia o en forma de remesa.

• Ingresos mensuales. El 75.63% tienen ingresos menores a los 10 mil  pesos (+/- 230 dólares a 2012 y solo un 4.15% reportó tener ingresos superiores a los 20 mil más o menos 450 dólares a 2012.

Aunque este estudio no es suficiente para describir el perfil sociodemográfico de toda la población GTH del país, permite apreciar grandes disparidades en los niveles de escolaridad, empleo e ingresos con relación a la población heterosexual.

Problemas de auto aceptación en lesbianas y gays

Aunque son muchas las personas homosexuales que viven su homosexualidad de una manera libre y son problemas, también son todavía numerosas aquellas que se encuentran muy difícil ser gay o lesbiana en un mundo predominantemente heterosexual.

Algunas de estas personas tienen problemas de auto aceptación: piensan que ser homosexual es una especie de maldición, se sienten culpables o avergonzadas e incluso pueden llegar a mantener relaciones con personas del sexo tratado de negar ante sí mismas y ante los demás sus verdaderos sentimientos. Este auto rechazo o negación (o ambas cosas) traerá consigo una serie de problemas de tipo psicológico, principalmente depresión y una insatisfacción con su vida, junto a una sensación de falsedad, de no estar siendo ellos mismos o de estar engañando a sus amistades y familiares, lo cual a su vez agrava los problemas. De hecho, una persona homosexual que no se acepta a si misma puede sentirse culpable por ser lesbiana o gay y culpable también por ocultarlo.

En otros casos, los problemas están más relacionados con los demás: miedo a ser rechazados por sus amistades o familiares, a ser considerados raros, a la posibilidad de escuchar comentarios desagradables…

En cualquier caso, el resultado va a ser, en muchos casos, la ocultación de su verdadera identidad. Eso puede hacer que les resulte más difícil encontrar a otras personas como ellos con quienes puedan sentirse identificados y, por tanto, menos aislados, y compartir sus inquietudes y sentimientos con libertad, o bien, encontrar a alguien de quien enamorarse y con quien mantener una relación de pareja estable.

Depresión, sensación de soledad o abuso de drogas o alcohol como una manera de evitar una realidad que niegan, son los problemas más frecuentes que pueden tener estas personas, entre otros.

Situación de derechos humanos

En el país, las prácticas sexuales de naturaleza homosexual entre adultos que dan su consentimiento son legales. La edad de consentimiento es de 18 años, sin importar la orientación sexual.

La constitución dominicana en su artículo 39 prohíbe todas las formas de discriminación, aunque no especifica el tema de orientación sexual o identidad de género, cita “condición social o personal”. Antes  de la última modificación de la constitución en el 2010 existía una ambigüedad sobre el matrimonio igualitario, pero ahora el artículo 55 reconoce el matrimonio y las uniones de hechos (concubinato) solo entre hombre y una mujer. Pese a esto la embajada británica celebró en el 2014 la primera boda en territorio de la Republica Dominicana bajo las leyes de esta nación europea.

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