Los valores jurídicos y la justicia en Colombia

Para comenzar quiero explicar el criterio que existe entre la legitimación y crítica al derecho, pero antes que nada, este texto hace referencia a lo valores jurídicos que permiten la crítica al derecho para la interpretación y  aplicación de las normas, con relación al derecho y la justicia. En primer lugar, la justicia  es la fuente principal y la más fuerte, ya que está va regulada a través de las leyes.

Existen varios criterios sobre cómo se ha ido estableciendo los valores jurídicos y la justicia en Colombia uno de los autores que se enfatiza o cree necesario establecer los limites entre el derecho y la justicia es (Hans Kelsen) nos dice en su Teoría General del Derecho y del Estado, que “considera el derecho como el conjunto de normas de un orden jurídico determinado, cuyas interrelaciones constituyen su verdadera naturaleza”.

Es decir, pretende regular el ordenamiento jurídico encaminado no solo con la conducta humana sino también esos acontecimientos naturales que se refieran a ella, ya sea como consecuencia o como condición de la misma. Este autor, manifiesta que “la muerte es objeto del derecho, pues está regulada por la norma, pese a que es un proceso fisiológico natural (al ser producto de la conducta humana asesinato o cuando el derecho regula los medios y la forma de atender una emergencia natural como una inundación”.

Es decir, el objeto del derecho señala que no tiene el monopolio de tal (objeto) porque la religión y la moral también regulan la conducta humana; por tanto se hace necesario definirla con claridad para diferenciarlo de cualquier otra forma de regulación de conducta humana.

Es así, como otros autores han mencionado que la justicia es dar a cada uno lo que le corresponde, y la iusnaturalista material, personificada en Sócrates, que sostiene la plenitud y armonía de las virtudes tanto en la sociedad como en el individuo. Ahora bien, todo ordenamiento jurídico expresa un sistema de valores por lo tanto tienen fundamento racional y empírico y no metafísico porque se definen y fundamentan en el consenso racional de seres humanos que conviven en una sociedad abierta y democrática.

De cierto modo, hay que esclarecer que dentro de los valores han existido históricamente tres posiciones: la objetivista que sostiene que los valores son absolutos, eternos e inmutables, sin que dependan de la experiencia humana, la subjetivista que reduce los valores al plano de los deseos o intereses de los individuos y la discursiva que indica que los valores son el resultado de la racionalidad práctica, que llega a la dignidad, la libertad, la igualdad, la solidaridad, la seguridad y el bien común.

Actualmente frente a los diversos actos de corrupción que están siendo analizados por la justicia Colombiana es importante considerar y entender cuál es su fundamento ético, ya que la justicia es ciertamente uno de los conceptos evaluativos más importantes en la vida cotidiana, así como la ética, la moral y la filosofía política. El autor Zan menciona que, “si procuramos un equilibrio entre derechos y responsabilidades y a la vez un desarrollo de las comunidades sensibles y responsables, entonces tenemos las bases para plantear un diálogo moral”

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