MANTRA, UN LUGAR MÁS DEL PASADO

MANTRA, UN LUGAR MÁS DEL PASADO

Mantra, uno de los bares restaurantes más famosos hasta hace poco años en Neiva, ubicado sobre la orilla del majestuoso río Magdalena, en el sector del Malecón, hacían presencia personajes de alta sociedad por así decirlo, hijos de concejales, médicos, abogados, etc. Tuvo un impacto impresionante, sus platos no bajaban de quince mil pesos por más barato, se hacían demasiadas reservaciones para eventos importantes.

Hoy en día sólo son ruinas y todos nos hacemos la misma pregunta, si era un lugar tal altamente sofisticado, ¿Qué paso? ¿Por qué está en ruinas? Hace poco con un grupo de compañeros hicimos presencia en el Malecón, lugar donde se hallaba este majestuoso restaurante-bar.  

Es impresionante observar todo el lugar en sí, hace peso a la frase que dice que “con el paso de los años todo se va acabando”, allí realmente se ve esto. Todo se ha desgastado, acabado. Recuerdo hace muchos años cuando estaba en el colegio y nos trajeron al Malecón, era hermoso, todo su paisaje, empezando por el Mohán, nos sentíamos orgullosos de haber llegado allí. Hoy en día todo se ve desolado, triste.

Mantra, fue magia en un momento, fue felicidad, fue atracción, lo fue todo en un solo lugar. Pero sucedió como una triste novela de amor, su magia fue efímera, fue fugaz. Todo se acabó en un cerrar de ojos. Ya nada queda de aquel elegante lugar, donde se reunía la clase alta de la ciudad, donde se hacían grandes eventos, reinados y conciertos. Todo quedó en el pasado como su historia, ahora desde que el Gobierno Municipal ordenó su cierre su presente es distinto.

El restaurante Mantra se encuentra con las puertas cerradas desde el 3 de julio del año pasado. La oscuridad de la noche parece devorar el lugar, siendo cómplice de algunos vagabundos que han intentado ingresar a la fuerza.

Ya no queda nada que recuerde lo hermoso que fue este lugar, pues al pasar por allí tan solos se ven las ruinas,  de la entrada donde solían desfilar mujeres hermosas, sólo queda un pedazo de pared, en el momento en que cruzamos con mis compañeros por allí no se podía ni siquiera leer la frase “donde la magia es realidad” tan sólo quedan unas pocas palabras.

Además de todo se ha convertido en un lugar muy accesible para los delincuentes, ya es un real peligro pasar por allí en horas de la noche.

Ahora el consejo de Neiva intenta restituir el lugar donde yacía Mantra, sus argumentos, ya que la comunidad alega que este es un lugar público, que debe ser compuesto de nuevo, ya que esto sin duda alguna entorpece la imagen de este sector.

Son muchos los supuestos culpables del abandono y destrucción de Mantra, la quiebra del negocio y la forzada pero necesaria culminación de atención del lugar, Mantra cerró puertas, sus dueños abandonaron todo. Y los que se encargaron de ocupar y terminar de acabar todo, fueron los indigentes, ello se apropiaron del establecimiento al verlo solo y desocupado. ¿Qué más podían hacer?

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