MARCO TEÓRICO ADULTO MAYOR

MARCO TEÓRICO ADULTO MAYOR

Promoción de la salud

El envejecimiento, a parte de ser una evolución lógica de un proceso biológico, psíquico y social, es una cuestión de imágenes y actitudes. Términos como salud, bienestar, plenitud y satisfacción, parecen ser patrimonio exclusivo de unos tramos vitales desde un punto de vista cronológico, muy alejados del anciano. Este es un error muy frecuente, incluso en el personal de la salud, que impide afrontar de manera adecuada las necesidades que se plantean en el adulto mayor.

En 1974, el Informe Lalonde, denunció el desequilibrio existente entre la responsabilidad de los factores en los problemas de salud y la distribución del gasto entre dichos factores. El estilo de vida estaba en el origen del 43% de los problemas de salud. (Barragán, 2010)

Por lo cual, este planteamiento hace reflexionar sobre la necesidad de invertir tiempo en la prevención, hábitos de vida saludables y detección precoz de las enfermedades a partir de las nuevas posibilidades que ofrece la genética. (Barragán, 2010)

Nutrición

El envejecimiento de la población se asocia a una mayor prevalencia de problemas nutricionales. Los adultos mayores tienen mayor riesgo de padecer malnutrición por diferentes factores como la disminución en la ingestión de alimentos, anorexia asociada a factores psicosociales, problemas masticatorios y de deglución, cambios fisiológicos en la función gastrointestinal, enfermedades crónicas oncológicas y no oncológicas, entre otros.

Por las frecuencias de trastornos nutricionales tan altas, se considera que esta condición debe ser incorporada dentro de la valoración geriátrica integral, entendiendo ella como el “proceso diagnóstico evolutivo multidimensional e interdisciplinario que permite identificar y cuantificar los problemas físicos, funcionales, psíquicos y sociales que puedan presentar los adultos mayores, con el propósito de desarrollar un plan individualizado de cuidados integrales, que permita una acción preventiva, terapéutica, rehabilitadora y de seguimiento, con la óptima utilización de recursos a fin de lograr el mayor grado de autonomía y mejorar su calidad de vida”. (Varela, 2013)

Actividad física

Muchos ancianos, debido a sus estilos de vida sedentarios, están peligrosamente cerca de su nivel de capacidad máxima durante actividades normales de la vida diaria. Una pequeña disminución del nivel de actividad física en estas personas podría provocar el paso de un estado de independencia a un estado de discapacidad, que se caracterizará por la necesidad de asistencia para la realización de las actividades cotidianas. Por lo tanto, la prevención de la dependencia adquiere una dimensión especial para evitar el deterioro de la calidad de vida y la dependencia de los mayores. (Barriopedro, 2001)

Esquema de vacunación

Solemos pensar las vacunas son sólo importantes para los niños, sin embargo, ellos no son los únicos que se encuentran en riesgo de contraer enfermedades. Es de gran importancia de la aplicación de vacunas a adultos mayores de 60 años  ya que el sistema inmunitario suele debilitarse con el paso de los años, lo que hace que el cuerpo sea más susceptible a contraer enfermedades. Vacunarse evita o disminuye el riesgo de contagiarse con enfermedades que pueden ser potencialmente mortales.

En México, según el Instituto Nacional de Geriatría (Gutiérrez Robledo, Dr. Luis Miguel, 2016) informo que en los años de 2007 a 2014 se tuvieron en promedio 27 millones de casos de infecciones respiratorias incluyendo neumonías e influenza en México, siendo el rango de edad adultos de entre 40 y 80 años. El 97% de las personas que fallecieron no estaban vacunadas o presentaban una enfermedad crónica no controlada, lo cual ha aumentado las campañas de vacunación en adultos mayores en los últimos 5 años.

El esquema de vacunación en la cartilla de adulto mayor está conformada por tres vacunas:

1. Antineumocócica polisacárida (Una dosis): A partir de los 65 años. Es la complicación más común de la fiebre y es causada por la bacteria Streptococcus Pneumoniae. La infección se adquiere por contacto directo de persona a persona, siendo la mayor población en riesgo los adultos mayores, esta tiende a desarrollar más complicaciones como la neumonía, infecciones en la sangre y meningitis.
2. Toxoide tetánico y diftérico: En mujeres y hombres con esquema de Td completo y documentado reciben un refuerzo de Td cada 10 años. En quienes no tengan dosis de Td documentadas, reciben 3 dosis (La primera al momento del primer contacto, segunda al mes de la primera dosis, y tercera a los 12 meses de la primera dosis).

El tétanos es una enfermedad que causa contracciones en el cuello y que puede ser mortal si no se trata a tiempo.

La difteria es una enfermedad respiratoria grave, en algunos casos puede causar problemas respiratorios, parálisis o incluso la muerte.

La tos ferina es una enfermedad altamente contagiosa de las vías respiratorias que se transmite por contacto directo con las descargas en el aire de las personas infectadas y mata a cerca de 300 mil personas cada año.

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