MEDICIÓN DELA POBREZA en México

OECD, MEDICIÓN DELA POBREZA

Para medir la pobreza en sus países miembros^[1], la OCDE  implementa  una medida unidimensional^[2] con enfoque objetivo que a su vez se deriva en  una línea  de pobreza relativa (nivel de ingresos).

La línea de pobreza relativa implementada, se basa en una fracción de la mediana del ingreso total disponible de toda la población. Es decir,  que  la forma de obtener el umbral de pobreza de una población determinada está basada en un cierto porcentaje de la mediana  del  ingreso equivalente a  toda la población. Este ingreso es expresado en términos nominales (a precios corrientes), por lo tanto, esta línea de pobreza  cambia con el tiempo, a medida que cambia la mediana de ingresos a través del tiempo.  En general  se suele elegir como línea de pobreza entre 40%, 50% y 60% de la mediana  de ingresos, sin embargo el más usual utilizado por la OCDE es el  que corresponde al 50%( Garroway, C. and J. de Laiglesia, 2012).  

Dando un ejemplo austero, supongamos que en un país viven cuatro personas en  donde los ingresos per cápita son de $50, $100, $150 y $200 respectivamente, entonces la mediana se posiciona en $125 y el 50% de la media del ingreso es de $62,5.  La media divide en dos partes a una población determinada. Por lo tanto,  parte de la población que se sitúen por debajo del umbral de pobreza es considerada  como pobre (OECD, 2015)

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CEPAL, ESTIMACIONES DE LA POBREZA

El enfoque utilizado por la CEPAL para estimar la pobreza consiste en clasificar a una persona como "pobre" cuando el ingreso por habitante de su hogar es inferior al valor de la línea de pobreza, o monto mínimo necesario que le permitiría satisfacer sus necesidades esenciales. Las líneas de pobreza, expresadas en la moneda de cada país, se determinan a partir del valor de una canasta de bienes y servicios, empleando el método del "costo de las necesidades básicas".

Tengamos en cuenta que la canasta está compuesta por dos grupos de bienes los cuales son bienes alimentarios y bienes no alimentarios.

Con respecto al primer grupo, su fin es generar una canasta con bienes necesarios  que satisfagan  todas las necesidades básicas de nutrición de una población determinada, tomando en cuenta  los hábitos de consumo, la disponibilidad efectiva de alimentos y sus precios relativos, así como las diferencias de precios entre áreas metropolitanas, demás zonas urbanas y zonas rurales.

Con relación al segundo grupo, la idea es generar una canasta básica de otros bienes que consiste en identificar los requisitos mínimos de necesidades tales como, vivienda, educación, vestuario, trasporte, etc.  (Feres, Juan Carlos. and  Mancero Xavier ,2001).

En la mayoría de los casos, la información sobre la estructura del consumo de los hogares, tanto de alimentos como de otros bienes y servicios, proviene de las encuestas nacionales de  hogares que se llevan a cabo en la mayoría de los países de América latina. Cuando no se dispuso de datos derivados del procesamiento de una encuesta reciente de este tipo, se utilizaron otros antecedentes pertinentes sobre consumo familiar. (CEPAL, 2015.)

Anexo. Canasta de bienes alimentarios INEGI – CEPAL (1992) actualizada a precios del 2005

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CONEVAL, MEDICIÓN DE LA  POBREZA POR INGRESO

La metodología para la medición de la pobreza por ingreso de la CONEVAL se basa en determinar  distintos niveles de carencia  de ingresos (líneas de pobreza) de la población. Estas líneas de pobreza se determinan a partir de los precios  promedio de los bienes necesarios para la adquisición de una canasta alimentaria básica. La determinación de  las canastas no alimentarias se obtiene al  aplicar un criterio que consiste en el inverso del  coeficiente de Engel.  

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