Marco teórico Industria Audiovisual en Chile

1. MARCO TEÓRICO

ANTECEDENTES DE LA INDUSTRIA AUDIOVISUAL EN CHILE

        Para empezar a hablar de industria audiovisual, se debe entender que ésta forma parte de una industria creativa, la cual se define por la UNESCO^[1] como “aquellos sectores de actividad organizada que tienen como objeto principal la producción o la reproducción, la promoción, la difusión y/o la comercialización de bienes, servicios y actividades de contenido cultural, artístico o patrimonial”^[2].

Las industrias creativas han adquirido cada vez más protagonismo en los países de desarrollo donde se ha ido diversificando la matriz productiva, en el sentido de que la producción y consumo de bienes van dando paso a una economía que también se basa en los servicios. Chile no es la excepción y es en este marco donde la creación, producción y comercialización de contenidos de naturaleza cultural pasan a tener relevancia en el crecimiento económico de una nación. Las industrias asociadas al sector creativo generan beneficios tanto en términos económicos, como creación de fuentes de trabajo y estimulación de economías locales a través del turismo y el consumo, como de mejoramiento en calidad de vida de las comunidades involucradas. Además, contribuyen al desarrollo de otras industrias y preparan la fuerza laboral para participar del mercado global de trabajo, logrando traspasar el solo beneficio de quienes aprecian y acceden directamente a la obra creativa, aumentando el capital cultural y creando elementos patrimoniales que traspasan generaciones, además de posicionar a Chile en el extranjero. Chile es un país con muchas particularidades, donde incluso desventajas geográficas pueden transformarse en oportunidades para desarrollar soluciones creativas.

Es debido a todo el desarrollo que genera, que la industria creativa se considera un sector con alto potencial de crecimiento a nivel nacional, razón por la cual el Gobierno de  Chile ha tomado medidas para incentivar el desarrollo del mismo. Esta priorización se basa en la posibilidad de consolidación de oportunidades, en el tamaño actual y esperado del sector, en la compatibilidad con ventajas competitivas actuales o factibles de ser desarrolladas en la economía chilena, y en la posibilidad de que el sector pueda ser considerado más bien como una plataforma transversal que sustente a otros sectores que como un rubro individual. De esta forma, la economía creativa actúa como catalizador de la economía general y ofrece un efecto multiplicador de externalidades positivas, que impactan en la vida de todas las personas que forman parte de esa economía. 

Del estudio “Mapeo de Industrias Creativas, Caracterización y Dimensionamiento”^[3] realizado por el Consejo Nacional de la Cultura y las Artes, se puede extraer la imagen 1, en la cual se observa que el escenario para el sector creativo se ve influenciado positivamente al establecer que uno de los sectores en los que es posible apostar como eje de desarrollo es el de la creatividad.

Imagen 1. Sectores de la economía chilena, según potencial de crecimiento y esfuerzo para lograr la competitividad necesaria

[pic 1]

Fuente: Imagen extraída del estudio “Mapeo de Industrias Creativas, Caracterización y Dimensionamiento”, realizado por el Consejo Nacional de la Cultura y las Artes.

Donde:

1. Alimentos procesados de consumo humano

2. Fruticultura primaria

3. Horticultura primaria

4. Lácteos

5. Alimentos procesados para consumo animal

6. Vitivinicultura

7. Porcicultura y avicultura

8. Ganadería (bovina y ovina)

9. Silvicultura

10. Productos de madera

11. Celulosa y papel

12. Minería de cobre y subproductos

13. Minería no metálica

14. Acuicultura

15. Comunicaciones

16. construcción

17. Consultoría

18. Educación superior

19. Logística y transporte

20. Outsourcing

21. Medicina especializada

22. Servicios financieros

23. Plataforma de negocios para Latinoamérica

24. Servicios relacionados al medio ambiente

25. Turismo

26. Industrias creativas

27. Comercio minorista

28. Industria química

29. Farmacéutico

30. Industria del plástico

31. Metalurgia

Es más, las industrias creativas se posicionan como un sector con alto potencial de crecimiento considerando el cruce de una serie de variables como por ejemplo el crecimiento potencial del PIB de cada sector y el esfuerzo que debería realizar el Estado para el fortalecimiento del mismo.

Para relevar datos duros respecto al aporte de la industria creativa a la economía nacional, el Consejo Nacional de la Cultura y las Artes (CNCA) encargó un estudio “Actualización del impacto económico del sector creativo en Chile”, el cual busca mejorar la información económica disponible sobre el sector para la toma de decisiones de política pública, para lo que recopila datos respecto al aporte de la cultura al PIB, empleo, comercio exterior, gasto de gobierno en cultura, entre otros. Los datos corresponden a diversos sectores^[4], determinando que las ventas del sector cultural corresponden a un 1,5% de las ventas totales del país en el año 2014^[5].

Por otro lado, la medición del valor agregado para el sector creativo muestra que, para el año 2013, contribuyó con un 2,2% al valor agregado de toda la actividad económica. En ese sentido, es posible observar que el sector creativo contribuye al PIB de manera similar a la que lo hace el sector agropecuario/silvícola (2,6%) por ejemplo, lo que debe estudiarse para generar propuestas y líneas de acción que contribuyan al desarrollo de esta industria.

En el año 2015, el gasto del gobierno en cultura alcanzó los casi $445 mil millones, lo que incluye el gasto en servicios cultuales y en otros programas de instituciones no estrictamente culturales, así como también el crédito fiscal entregado a donaciones culturales, representando un 1,2% del presupuesto ejecutado total del gobierno.

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