Medidas Economicas De Maduro

¡Dios proveerá!

El fin de este escrito es hablar sobre las medidas económicas anunciadas este 21 de enero del 2015 por el Presidente Nicolás Maduro, durante la presentación de su Memoria y Cuenta ante la Asamblea Nacional, presentación en la cual básicamente, se mantienen las mismas políticas de controles de cambio y precios que se vienen aplicando desde hace una década, solo que se crean organismos nuevos que van a centralizar y, supuestamente, regular de manera más integral “el sistema de formación de precios”.

El otro argumento, que tiene más elementos de validez, es que el sector privado no produce divisas al país y ha recibido, este año, 33.000 millones de dólares, de los cuales al menos 10.000 millones no tendrían justificación, según Maduro. La verdad es que el sector privado nunca ha generado un flujo significativo de divisas, porque las exportaciones no tradicionales, o no petroleras, siempre han significado montos relativamente pequeños, e incluso marginales, en la estructura de ingresos nacionales, pero eso es imputable mas a una estrategia gubernamental de dominio económico, que no es nueva, que al deseo de los empresarios.

Sencillamente, nunca ha existido una política consistente de estímulo a las exportaciones no tradicionales, y lo que se ha hecho en la última década es, por el contrario, crear las condiciones para reducirlas a su mínima expresión, porque el estatismo que está en la base de la ideología del chavismo asume que Venezuela no necesita más que al sector petrolero, manejado por el Gobierno, para recibir el fuelle financiero para funcionar. Hoy, la dependencia petrolera alcanza a 97% de las divisas de que dispone la República y representa más de 60% de los ingresos fiscales, si se suman los ingresos “extraordinarios” que se generan a partir de la subestimación de los precios de los hidrocarburos en los presupuestos anuales.

En la cadena hubo de todo. Se anuncio la aprobación de 60.000 millones de bolívares para los aguinaldos de empleados públicos y pensionados; ataques a opositores y medios de comunicación, con insultos y descalificaciones basadas en supuestas pruebas que no hay manera de certificar; demagogia, nominalismo, amenazas a sectores y campaña electoral abierta. Lo que no hubo fue anuncios importantes que permitieran cambiar las expectativas negativas sobre la economía, que, según las encuestas más recientes, ya comparte transversalmente la mayoría de la sociedad. El jefe de Estado anunció un sistema cambiario donde reitera la vigencia de un esquema de tres tasas oficiales como el actual, de nuevo ofrece abrir espacio a operadores privados, y otra vez llamó a un debate público para el “necesario” aumento de precio de la gasolina más barata del mundo; también decretó un aumento de 15% de salario mínimo y autorizó ayudas sociales mediante becas. Pero en una economía que antes de la caída del precio del petróleo

...