Modo de producción capitalista

Modo de producción capitalista

Históricamente el capitalismo como sistema económico surge en Europa a mediados del siglo XVII, por medio de acontecimientos históricos como las cruzadas, cuando los europeos cristianos quisieron restablecer el control apostólico romano sobre Tierra Santa, donde consecuentemente a este suceso se manifiesta un intercambio comercial entre Europa, el medio oriente y pueblos de Asia. Tiempo después surge el renacimiento, movimiento cultural que se caracteriza por el sentimiento individualista que desarrolla el hombre; aspecto que para el sistema capitalista está en constante relación.

Según la teoría de Karl Marx, el capitalismo sería el predecesor al feudalismo del medioevo, el cual tuvo fin conforme al surgimiento de las sociedades capitalistas posteriores a las revoluciones burguesas.

Como modo de producción se caracteriza por estar dividido en dos clases fundamentales que a la vez son opuestas entre sí; Clase 1: Los capitalistas, dueños y encargados de la organización de los medios de producción de propiedad privada, y la Clase 2: el proletariado, trabajadores por medio los cuales la clase dominante de capitalistas obtiene sus ingresos, generados por la venta de fuerza de trabajo que estos obreros ofrecen a cambio de un salario.

En el modo de producción capitalista, el capital está por encima del trabajo, surgiendo así la alienación; aquella donde el trabajo para el proletario se vuelve ajeno así mismo, de esta forma la explotación del hombre por el hombre genera plustrabajo, un excedente a la cantidad de trabajo que solo se ve reflejado en la plusvalía, valor monetario del trabajo realizado, pero claro de la cual solo goza el dominante capitalista.

Esto genera una notoria desigualdad entre las clases sociales, aspecto característico del sistema capitalista y a esta se suma la distribución inequitativa de la riqueza; la cual se concentra en quienes más capital tienen. Entonces las actividades de inversión y obtención de beneficios, así como de relaciones laborales, tanto autónomas como asalariadas subordinadas y sobre todo libres que presume el modo de producción capitalista, solo benefician a una clase social dominante, dejando de lado a los que en mayoría superan a los capitalistas.

Por esta y otras mas injusticias del capitalismo surgen las crisis cíclicas, donde su propio modo de producción no solo afecta la clase obrera sino también al capitalista, ya que el mismo beneficio del sistema como lo son las relaciones de competencia constante lo obligan a buscar alternativas de mejoramiento para contratacar a la competencia por medio de la implementación de más recursos, más maquinaria, más productividad de trabajo y así se le es más difícil valorizar su capital. Generando un colapso en el modo de producción que da paso al surgimiento nuevos modos de producción como el socialista.  

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