Otro punto importante que hay que enfatizar que es conveniente que la entrevista sea dirigida y limitada.

La entrevista inicial con los padres

Entrevistas posteriores con los padres

Se suguiere que en la entrevista inicial, estén presentes ambos padres de familia, sin el hijo presente, pero si informandole de la misma.

Una vez que poseemos los elementos útiles y la elaboración de diagnóstico, concertamos una nueva entrevista con los padres

Los datos que dan los padres suelen ser inexactos, deformados o muy superficiales, ya que durante la entrevista los padres pasan por angustia lo cual hace que olviden datos más relevantes.

Es previo a la orientación o tratamiento, pues no conviene crearles una nueva ansiedad al ofrecerles una solución que sea inaccesible para ellos.

La entrevista debe tener un plan previo, tiene que ser dirigida y limitada conforme al tiempo.

Partir de la base de que un padre comúnmente no sabe lo que es un tratamiento psicoanalítico

Se registra fecha de iniciación del sintoma, asi como desarrollo, agravación o mejoría del sintoma, para luego compararlas.

El conocimiento del desarrollo de las primeras etapas nos permite valorar lo normal o patológico de un logro, de una conducta o de una dificultad

En la entrevista se pregunta, si el niño fue deseado o accidental, si hubo rechazo abierto con deseo de aborto, intentos realizados, o si lo aceptaron con alegría.

El psicoanalista de niños se enfrenta con el doble problema de la transferencia del paciente y de los padres

• Se investiga la fecha del destete y sus condiciones.
• Cuando el niño pronuncia la primera palabra.
• Retraso o inhibición del lenguaje.
• Cuando y como fue comenzo la marcha.
• La edad y forma en que realizo el control de esfinteres.
• Enfermedades, operaciones o traumas; así como la reaccion emocional de los padres.

Con el descubrimiento de la técnica de juego se hizo posible comprender cómo funcionaba la mente del niño pequeño interpretar sus conflictos y solucionarlos.

Si la interpretación es el instrumento básico del tratamiento psicoanalítico y en especial la interpretación de la transferencia, era evidente que la relación con los padres sin la interpretación los dejaba liberados a cualquier tipo de elaboración.

En la reconstrucción de un día del niño, se hace preguntas concretas, que nos orienten sobre experiencias basicas de dependencia e independencia, libertad o estabilidad de las normas educativas, del dar y recibir.

Realizar entrevistas en condiciones establecidas de antemano; el niño debe de estar informado de cuándo verán a sus padres y se le será comunicado todo lo que se hable. Se le informa también que el contenido de sus sesiones no será revelado

En las relaciones familiares, se pregunta la edad, ubicación dentro de la familia, saber si los padres viven o no, profesión o trabajo que realizan, horas que pasan fuera de la casa, condiciones generales de vida, sociabilidad de ellos y de sus hijos. Es posible que se llegue a disponer de más de una hora en estas preguntas, sobre todo para los principiantes.

El adoptar esta conducta lleva a un real afianzamiento del vínculo con el niño y a una mejor relación con los padres Estos se sienten aliviados al depositar toda la enfermedad en manos del analista con la consecuente disminución de culpa al ser compartida.